Un grupo de vecinos del entorno de la plaza de la Aurora, en el corazón de la barriada de las Casas Nuevas, ha vuelto a reclamar la intervención del Ayuntamiento de Montilla o de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado ante los «continuos» actos vandálicos y los comportamientos «incívicos» que aseguran estar sufriendo «desde hace meses».
Tal y como ha relatado a CÓRDOBA una vecina que ha preferido preservar su identidad, los hechos denunciados se concentran, fundamentalmente, en la zona conocida como Los Merenderos, junto a la sede de la Asociación de Vecinos Gran Capitán donde, según los afectados, «se concentran bastantes grupos de adolescentes que forman escándalo hasta altas horas de la madrugada, no solo los viernes y sábados sino, también, incluso entre semana».
Aparte del ruido que generan estas pandillas –y que, tal y como aseguran los afectados, dificultan el descanso de las familias que residen en las inmediaciones–, algunos vecinos del entorno denuncian el lanzamiento de naranjas de los árboles que hay plantados en la plaza contra los cristales y las ventanas de algunas terrazas. «Hace poco lograron romper el cristal de una vivienda en la que había un niño pequeño y los cristales cayeron cerca, con el riesgo que eso conlleva», precisó la misma vecina.
Según los testimonios aportados a este periódico, «estos actos de vandalismo no se pueden tolerar» y «aunque están denunciados ante la Policía Local y la Guardia Civil, hasta ahora ha servido de bien poco». En ese sentido, los vecinos afectados hacen también un llamamiento a los padres y madres de los jóvenes que se concentran en la zona «para que traten de controlarlos y tomen cartas en el asunto».
La Policía Local ya está al tanto
Por su parte, el alcalde de Montilla, Rafael Llamas, aseguró que la Policía Local «ya está al tanto de la situación y está tratando de poner medidas para minimizar o evitar estos actos incívicos», toda vez que hizo un llamamiento a las personas que se concentran en la Plaza de la Aurora para que «respeten el descanso de los vecinos».
Tal y como confirmó una de las vecinas afectadas, el teniente de alcalde de Desarrollo Local y Seguridad, Valeriano Rosales, contactó recientemente con una de las vecinas y le trasladó la posibilidad de retirar los bancos de la plaza para, de este modo, tratar de dispersar a las pandillas que se reúnen en este lugar, medida que vienen reclamando los vecinos desde hace tiempo.
«También nos anunció más presencia policial, con agentes incluso de paisano, pero por aquí no viene nadie ni aunque los llamemos y siguen fumando porros y moviendo droga», relató una de las afectadas, quien aseguró que, hace apenas unos días, varios residentes en la zona tuvieron que soportar «un sinfín de balonazos» en las ventanas y en la persiana metálica de un establecimiento, que generaron un enorme ruido en mitad de la noche. «Fueron varios los vecinos que llamaron a la Policía Local y aquí no apareció nadie», concluyó.
