La Gendarmería francesa arrestó este domingo a los dos últimos presuntos miembros de la manada de Magaluf, y que habían huido de Mallorca tras la agresión sexual múltiple a una joven turista británica de 18 años. La Guardia Civil considera cerrado el caso con la detención de los ocho jóvenes que presuntamente violaron a la víctima en la madrugada del pasado lunes. Los seis primeros, arrestados en las horas siguientes a los hechos, ingresaron en prisión tras declarar en el juzgado de guardia.
Según informa la Guardia Civil, en la mañana del pasado lunes tuvo conocimiento de una agresión sexual múltiple de la que habia sido víctima una joven turista británica de 18 años en un hotel de Magaluf. De inmediato fueron movilizados agentes de diferentes grupos para tratar de localizar y arrestar a los agresores, mientras que especialistas en delitos sexuales acompañaban a la víctima en todo momento. La joven vue trasladada a Son Espases, donde recibió asistencia médica y fue examinada por el forense, y posteriormente acompañada al juzgado de guardia para denunciar la agresión.
Los investigadores advirtieron de inmediato que se enfrentaban a un caso complejo. La joven había sido violada por un numeroso grupo que aparementemente no tenían conexión previa entre sí, sino que habían coincidido en ese momento y se habían animado a participar unos a otros en la agresión múltiple.
La rápida intervención de la Guardia Civil condujo a la detención, el mismo lunes, de seis de los presuntos agresores sexuales, cinco jóvenes franceses y un suizo. Al día siguiente fueron conducidos a disposición judicial y el titular del juzgado ordenó el ingreso en prisión provisional sin fianza para todos ellos.
Posteriormente la investigación pudo determinar que los agresores sexuales habían sido realmente ocho. Faltaban dos. Los agente pudieron identificarles tras una serie de pesquisas a contrarreloj, pero no pudieron capturarles ya que habían tomado precipitadamente un vuelo al aeropuerto de Baden-Baden (Alemania), con de fin de desplazarse desde allí a sus residencias, en el departamento francés de Estrasburgo.
Una vez con los sospechosos identificados, la Guardia Civil solicitó por los cauces establecidos la colaboración de las autoridades francesas, y pidieron al juez que instruye el caso en Mallorca que expidiera sendas Órdenes Europeas de Detención (OED), que fueron remitidas a la policía francesa a través de Europol.
Ayer por la mañana la Gendarmería Nacional francesa comunicó a la Guardia Civil la detención de uno de los sospechosos en la localidad de Scherwiller. A media mañana fue arrestado el otro en el aeropuerto de Basilea-Mulhouse-Friburgo, en la frontera entre Francia y Suiza, cuando se disponía a tomar un vuelo con destino a Turquía con la intención de huir de la justicia.
Según informa la Guardia Civil, desde el 1 de junio de este año se ha puesto en marcha un equipo de Policía Judicial especializado en delitos de ámbito sexual en la zona de Calvià. Añaden que la rápida y eficaz actuación de este equipo en coordinación con la Guardia Civil de Calvià ha permitido la detención de todos los implicados en la brutal agresión. Así mismo, la colaboración de los gendarmes franceses y los carabinieri italianos en servicio en Baleares durante la Operación Verano, ha sido imprescindible para la resolución del caso.