Israel confirma primer caso de la variante BA.2.86 del COVID-19, apodada Pirola por científicos. OMS y CDC en alerta por mutaciones.
La OMS vigila estrechamente a Pirola
La Organización Mundial de la Salud está monitoreando la nueva variante, detectada también en Dinamarca y Estados Unidos.
Debido a sus numerosas mutaciones en el gen de la espiga, la OMS clasificó a la BA.2.86 como bajo vigilancia.
“El impacto potencial de las mutaciones de BA.2.86 se desconoce en la actualidad y se está evaluando cuidadosamente”, expresó la OMS.
Posición de los CDC frente a Pirola
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE. UU. están siguiendo de cerca la nueva variante.
“A medida que sabemos más sobre BA.2.86, el consejo de los CDC sobre cómo protegerse de COVID-19 sigue siendo el mismo”, informó la entidad.
En relación con la cepa XBB.1.5, dominante actualmente, Pirola presenta 36 mutaciones.
Desafíos en la detección de nuevas variantes
El seguimiento ha enfrentado problemas debido a la disminución de secuenciación genética de casos de COVID-19.
En el último mes, se secuenciaron solo 91 casos en Dinamarca y 231 en Israel, lo que sugiere una detección incompleta.
El experto Tom Peacock enfatiza la necesidad de análisis adicionales para entender la relevancia de Pirola.
Preocupación científica por reducción de pruebas
La disminución global de pruebas ha alarmado a la comunidad científica, sobre todo considerando la próxima llegada del otoño.
Christina Pagel, de University College de Londres, insta a intensificar las prácticas de control.
El objetivo es evitar una posible crisis en los sistemas de salud durante el invierno.