Tras el éxito del primer encuentro del Foro Move, celebrado el año pasado para dar respuesta a algunos desafíos del sector en torno a la movilidad sostenible, la compañía de renting y gestión de flotas ALD Automotive | LeasePlan celebró el segundo encuentro del II Foro Move de Movilidad Sostenible, denominado Tecnología para descarbonizar nuestra forma de movernos.
El tema central del debate fue el papel que juegan la innovación y la digitalización hacia la neutralidad climática y, en esta ocasión, el encuentro contó con la presencia de Antonio Cruz, subdirector general de ALD Automotive; Juan Ignacio Garmendia, partner account manager en Geotab; Nerea Luis, directora de Data&AI en Sngular; Javier Martínez Ríos, director de E-Mobility de EDP; Toni Massot, responsable de proyecto de Novolitio en Urbaser, y Filippo Brunelleschi, EMEA Director of Market Operations de Superpedestrian.
Big Data e Inteligencia Artificial para transformar la movilidad sostenible
En las últimas décadas, los avances tecnológicos han modificado los hábitos sociales en todos los ámbitos, incluido el de la movilidad, donde las diferentes innovaciones han posibilitado un gran despliegue de posibilidades técnicas, con complejos sistemas de software que están transformando la movilidad en más eficiente, segura y fácil. “En los próximos años, el futuro se jugará en clave digital. Y, con el permiso de los fabricantes, la pelea será más por los datos que por los propios vehículos”, afirmó Antonio Cruz, subdirector general de ALD Automotive.
Cabe señalar que, en este sentido, los sistemas de asistencia a la conducción, el GPS o los sensores son tecnologías ya integradas con un enorme potencial. Según Juan Ignacio Garmendia, partner account manager de Geotab: “la gestión correcta de los datos nos ayuda a conectar los vehículos y que compartan información, lo que también puede contribuir a la adopción del vehículo eléctrico”. Asimismo, Garmendia recalcó que el uso de la tecnología y la apuesta por la innovación son fundamentales en la implantación de flotas más sostenibles, más limpias y más eficientes.
Y es que la electrificación del parque automovilístico, junto a la descongestión del tráfico y un aire más limpio son los principales desafíos de la movilidad en la actualidad, por lo que la tecnología se posiciona como impulsora clave para la asunción de estos retos. Tal como subrayó Nerea Luis, directora de Data&AI en la consultora Sngular: “a través de la IA se pueden convertir los datos en conocimientos”. También recordó que “entender cómo funcionan las ciudades y establecer procesos de análisis de cómo y cuándo se mueven las personas puede ayudar a mejorar sensiblemente la movilidad”.
No obstante, a pesar de que los nuevos vehículos están preparados y cuentan con softwares potentes, la realidad es que la infraestructura urbana todavía está lejos de alcanzar los mismos niveles, por lo que “la necesaria interacción entre la ciudad y los vehículos, aunque técnicamente es posible, aún no puede producirse”.
Según Filippo Brunelleschi, EMEA Director of Market Operations de Superpedestrian: “Vamos hacia una visión de ciudades mucho más orgánicas. A algunos les suena a utópico, pero ya es real tanto en zonas de Estados Unidos como en el norte de Europa. No son modelos irreales y la IA los está empujando”.
Una movilidad digital, eléctrica y circular
Aunque la falta de infraestructuras urbanas es una realidad, cabe destacar que la evolución es imparable y que en los últimos años se están produciendo grandes avances en esta dirección: los puntos de recarga se han duplicado en apenas año y medio, alcanzando ya los 20.000, y se prevé que continúe la expansión.
Durante el diálogo también se abordó la problemática del final de la vida útil de las baterías y los presentes recordaron la necesidad de entender el reciclaje como un proceso necesario en la movilidad del futuro, bajo la perspectiva de una economía circular que fomente su reciclado y el aprovechamiento de los materiales que las conforman para darles una nueva vida una vez llegado el momento.
Según Toni Massot, portavoz de Urbaser: “el gran problema que enfrentamos ahora es que cada fabricante utiliza una batería diferente, con componentes químicos distintos, lo que complica su tratamiento. Aunque se incluye un pasaporte de baterías, su reciclaje es un enorme reto para los talleres y para las plantas, tanto a nivel logístico como de funcionamiento. Es fundamental contar con una legislación clara que ayude a evitar el greenwashing, ya que contribuye a que empresas, administraciones, gestores de residuos y ciudadanos sepan qué tienen que hacer con las baterías de sus vehículos”.
Al finalizar el encuentro se llegó a la conclusión de que todos los desafíos a los que se enfrenta la movilidad sostenible precisan de tecnología, innovación y digitalización, pero también de espacios donde puedan abordarse de forma transparente y rigurosa.