Cerrada la renovación de Carlo Ancelotti antes del 1 de enero, en una maniobra poco habitual en Florentino Pérez, ahora toca mirar a la plantilla del Real Madrid, próximo rival del Real Mallorca en el reinicio de la Liga tras el parón navideño, donde hay cuatro jugadores que concluyen contrato, con situaciones deportivas y vitales muy diferentes en cada caso.
Toni Kroos, en su tejado
El primer caso, y el que más interés despierta en el madridismo y en los despachos es del alemán Toni Kroos. El teutón, a sus 33 años, está completando una temporada extraordinaria y se da por hecho que se podrá renovar al jugador por otra temporada. La política del presidente de renovar anualmente a los jugadores de más de 30 años invita a pensar que la oferta del club no superará ese plazo. La incógnita es saber qué planes tiene Kroos, quien ha comentado en más de una ocasión que se pensará al final del curso si le apetece seguir jugando al fútbol o retirarse a descansar y disfrutar de la familia. En Alemania se habla incluso de que hay compañeros de la selección alemana que le han llamado para tratar de persuadirle para que vuelva a jugar con la Mannschaft en la Eurocopa que se celebrará este verano en su país. Sea como fuere, en las oficinas del Bernabéu la intención es prorrogar su vínculo con el Madrid después de la gran temporada que está realizando, siendo uno de los jugadores que más ha destacado Ancelotti en el primer tramo de temporada.
Luka Modric enfila la despedida
El caso de Luka Modric es distinto. El croata se ha ganado el cariño y el respeto de aficionados, compañeros y dirigentes. Pero a sus 38 años, su etapa en el Madrid parece tocar a su fin y en las oficinas se habla más de una gran despedida que de una renovación. Luka ha perdido mucho protagonismo en el equipo, por más que Ancelotti siempre lo ha elogiado públicamente, pero la veteranía ya le impide estar a la altura en los choques de mucha exigencia física en los que Tchouaméni, Valverde, Camavinga o Kroos están por delante de él. Modric rechazó una oferta mareante de Arabia Saudí en agosto, pero parece que este próximo verano si podría aceptarla y marcharse a Oriente a terminar su carrera deportiva asegurándose un último contrato que dejé cómodamente asegurada la vida de sus hijos y hasta de sus nietos.
Lucas, a por la década como jugador blanco
Lucas Vázquez, a sus 33 años, es otro que se ha ganado a pulso la renovación. Carletto está encantado con el rendimiento del gallego, que hace ya años que asumió su rol de comodín en la banda derecha, como lateral reconvertido o centrocampista de banda. El gol decisivo en Vitoria ante el Alavés en el último partido antes de Navidad coronó un magnífico arranque de temporada del canterano, que después de probar una temporada en el Espanyol regresó al Bernabéu, donde está cumpliendo su novena campaña en el primer equipo. Jugador de club que no hace ningún reproche juegue o no y siempre sale con mejor disponibilidad, es un futbolista muy valorado por Ancelotti. Lucas ya ha declarado públicamente que su prioridad es renovar con el Madrid para cumplir una década en el equipo blanco, en el que ya ha conquistado cuatro Champions.
Nacho, el ‘one club man’
El último caso es el de Nacho Fernández, el central de la cantera y capitán de la primera plantilla, que a sus 33 años suma ya 13 temporadas en el primer equipo. Este año está teniendo más oportunidades debido a la plaga de lesiones y está cumpliendo con lo que le demanda Ancelotti, aunque su trabajo se ha visto salpicado por dos expulsiones evitables que han manchado su impecable expediente. El Real Madrid está peinando el mercado en busca de un central de jerarquía para fichar el próximo verano y no contempla desembolsar dinero por hacerse con otro ahora en enero. Una cesión, la reubicación de Tchouauméni o la subida de algún canterano son las alternativas que baraja el club a la espera de que se recupere de su rotura del ligamento cruzado Militao, se le espera en marzo o abril. Alaba es baja lo que resta de temporada. Pero en ese contexto surge la duda de la renovación de Nacho, que tiene ofertas de Italia y de la Premier, pero siempre ha optado por mantenerse como un ‘one club man’. Veremos si este verano mantiene ese status o decide probar fuera. El club aún no se ha posicionado en este caso.
Por tanto, a horas de que queden libres y puedan negociar con el que equipo que quieran, la situación parece clara para Kroos y Lucas Vázquez, más dudosa para Nacho, y en el caso de Modric estaríamos ante su última temporada en el Real Madrid, al que llegó el verano de 2012, después de la Eurocopa de Polonia y Ucrania, cuando protagonizó una negociación durísima entre Florentino y Daniel Levy para sacar a Luka del Tottenham. Este verano, doce años después, Modric se despedirá, si no ocurre nada raro, del Bernabéu consagrado como uno de los grandes jugadores de su historia, además de ser uno de los siete futbolistas que ganó el Balón de Oro siendo jugador del Real Madrid.
