El pasado jueves se cumplió el primer mes de Ángel Víctor Torres como ministro de Política Territorial y Memoria Democrática. El 21 de noviembre tomó posesión del cargo con altas expectativas sobre el papel y la tarea que debe desempeñar en el nuevo gobierno de Pedro Sánchez, y en este tiempo ha tenido una presencia pública más que discreta, pero en todo caso muy por encima que la mayoría de los integrantes del Consejo de Ministros salvo las vicepresidentas y el núcleo duro del presidente.
Tras cerrar el lunes el equipo que le acompañará (con los canarios Antonio Olivera como director de gabinete y Beta Pérez como subsecretaria) en un ministerio que ha cambiado algo su cometido respecto al anterior, asumiendo la parte de desarrollo de la ley de Memoria Democrática, Torres cree que tras las fiestas navideñas estará ya en condiciones de tomar una velocidad de crucero en la marcha del departamento.
El dirigente socialista canario tiene claro que su paso a la política nacional y su residencia temporal en Madrid no le va a impedir seguir muy de cerca la política de Canarias, y no esconde su intención de aprovechar el protagonismo que le da el ministerio para mantener su condición de líder de la oposición en las Islas, proyectarse como alternativa al actual Ejecutivo regional liderado por Fernando Clavijo, y repetir como candidato socialista en las elecciones autonómicas de 2027. Dejó claro desde el primer momento por ello que se mantendrá como secretario general del PSOE canario, y que el ministerio no será un obstáculo para seguir marcando la estrategia socialista en la política regional.
De entrada, Torres seguirá viajando a Canarias todos los fines de semana que le sean posibles y manteniendo como ministro también una agenda en las Islas, además de la del partido. Así lo ha hecho en este mes largo al frente del ministerio. Es uno de los pocos miembros del Consejo de Ministros que ahora vive en algunas de las residencias habilitadas en el Palacio de la Moncloa, como también es el caso de algunas vicepresidentas, y está muy conectado con el entorno más cercano del presidente, tanto con el ministro de la Presidencia y de Justicia, Félix Bolaños, como con el jefe de gabinete, Oscar López.
El líder del PSOE canario va a seguir con un pie en Canarias para volver a ser candidato
Sin ser del núcleo duro de Sánchez, sí es una de las personas que el presidente quiere que se sienta cómodo en el microclima político de Moncloa, en el propio Consejo de Ministros y en todo el ámbito gubernamental. Su labor hasta ahora es apreciada por el conjunto de sus compañeros.
Se da la circunstancia de que la sede del Ministerio de Política Territorial, en el número 3 de la Castellana, el histórico Palacio de Villamejor, se encuentra en obras, lo que mantiene a Torres y todo su nuevo equipo trabajando en otro inmueble dependiente de ese departamento (el servicio de Reclamaciones de la Administración Central del Estado, en otra zona de la capital), y no será hasta después del próximo verano, como mínimo, cuando el ministro pueda tener listo y operativo su despacho formal. Pero esta aventualidad no le está impidiendo tomar el pulso al departamento, relanzar la agenda del mismo y adquirir cierto protagonismo político como encargado de las relaciones con las comunidades autónomas con las que hay procesos de transferencias pendientes, gestionar parte de los aspectos pactados entre el PSOE y otras formaciones políticas en materia territorial, e impulsar el desarrollo de la ley de Memoria Histórica.
Desde su toma de posesión, la agenda del ministro canario ha sido de las más intensas del conjunto del Gobierno, lo suficiente en todo caso como para hacerse notar. Se estrenó a los pocos días prácticamente con sendos encuentros fundamentales con las administraciones locales y con las comunidades autónomas en la Comisión Nacional de Administración Local (CNAL) y en el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF), respectivamente, para debatir la senda de estabilidad del próximo año, y la futura reforma de la financiación autonómica, asistiendo como miembro nato de esos dos foros entre el Estado y los gobiernos locales y autonómicos junto a la ministra de Hacienda y Función Pública, María Jesus Montero.
Con la también vicepresidenta cuarta está en estrecho y permanente contacto para toda la agenda de relaciones entre el Gobierno central y los entes territoriales, y no se ha escondido a la hora de dar respuesta a las comunidades autónomas, o a los partidos políticos, sobre la reclamación general de poner sobre la mesa una propuesta de actualización del modelo de financiación, reconociendo que «no va a ser fácil» en el actual clima político.
Estreno parlamentario
Con esta cuestión como asunto de fondo, Torres ha tenido que hacer frente a la ofensiva de la mayoría de los presidentes de comunidades autónomas, entre ellos el de Canarias, Fernando Clavijo, de exigir por carta a Sánchez la convocatoria urgente la Conferencia de Presidentes, en la que él participará como ministro. Este asunto centró precisamente su estreno en una sesión parlamentaria, en el Senado, explicando que el propio jefe del Ejecutivo ya había respondido a esos requerimientos anunciando que se dicha convocatoria se haría en «próximas fechas».
Hasta ahora ha respondido a dos preguntas en el Senado, ambas del PP, y a una interpelación en el Congreso, de ERC. En los dos primeros casos, Torres se ha revelado como un efectivo «escudero» del presidente respondiendo a cuestiones sólo tangencialmente relacionadas con la política territorial, pues este semana ha tenido que hacer frente a una pregunta de la senadora vasca del PP María del Mar Blanco sobre la ley de amnistía, o incluso sobre la moción de censura acordada por PSOE y Bildu para quitarle al alcaldía de Pamplona a UPN.
Relanza en su primer mes los contactos con las comunidades e impulsa la ley de Memoria Democrática
Más allá de su capacidad para fajarse en la batalla política cotidiana, su prioridad ha estado en el relanzamiento de la relaciones con las comunidades autónomas y en especial con aquellas con asuntos pendientes. El principal de estos encuentros es el mantenido con la consejera de Autogobierno del País Vasco, Olatz Garamenti, para acelerar el traspaso de tres competencias y abrir un proceso de las que se han acordado en el marco del pacto entre el PSOE y el PNV para la investidura. Torres iba a a acompañar a Sánchez en su viaje del jueves pasado a Barcelona para entrevistarse con Pere Aragonés, y hablar él con consejeros del gobierno catalán sobre traspasos pendientes, pero finalmente se canceló esta parte del encuentro. Pero esta dinámica de impulso de los temas territoriales está siendo una de las prioridades del ministro.
En ese marco, Torres tiene pendiente para las primeras semanas del próximo año dar cobertura a la petición de Canarias de convocar la Comisión Bilateral con el Estado para renegociar las condiciones del traspaso de las competencias en gestión del litoral, algo para lo que Política Territorial es mero operador formal porque la cuestión de fondo habrá que negociarlo con el ministerio para la Transformación Ecológica. En todo caso, desde el entorno del dirigente canario se asegura que las relaciones con el actual Gobierno de Canarias «son buenas» y que el ministro y Clavijo se han visto y hablado en varias ocasiones durante encuentros y eventos de distintos tipo tanto en Canarias como en Madrid.
También en materia de Memoria Democrática Torres está intentando que esa competencia de su ministerio no quede como una asignatura menor, sino que quiere darle el realce que merece. Se estrenó precisamente como ministro en un acto público visitando en Arucas el pozo de Tenoya, una de las pocas fosas de la represión franquista exhumadas en Canarias y cuyos trabajos se iniciaron durante su etapa como alcalde de esa localidad grancanaria, y recibiendo a Asociación para la Memoria Histórica de Arucas (AMHA).
La pasada semana se comprometió en el Congreso a desarrollar la Ley de Memoria Democrática y avanzó que el Gobierno quiere tener listo en los primeros meses de 2024 el banco de ADN estatal, que la auditoría sobre los bienes expoliados también está culminándose, y que se le dará el impulso pertinente, al igual que al catálogo de todos los símbolos franquistas para su retirada.