Al menos 34 personas han resultado heridas en un ataque nocturno de las Fuerzas Armadas de Rusia contra la capital ucraniana, Kiev, de las cuales 15 han sido trasladados a hospitales para recibir tratamiento médico, incluidos dos niños, mientras que el resto han recibido asistencia médica en el lugar.

El alcalde de Kiev, Vitali Klitschko, ha indicado un edificio de apartamentos ha resultado dañado, así como las instalaciones de un hospital infantil. También se han incendiado varias casas y vehículos que estaban aparcados. El fragmento de uno de los misiles ha caído en un área abierta.

Además, la red de suministro de agua ha resultado dañada, por lo que los servicios de emergencia están trabajando para reparar los daños, según ha indicado Klitschko a través de su canal en Telegram.

El jefe de la Administración Militar de la Ciudad de Kiev, Serhiy Popko, ha señalado que en «el segundo ataque con misiles de alta velocidad contra Kiev en los últimos días» las defensas aéreas han destruido «todos los objetivos enemigos». «Pero como resultado del derribo de los misiles, han caído restos en tres distritos del margen izquierdo de la ciudad», ha reconocido.

Popko ha indicado que se están actualizando los datos sobre las víctimas, que presentan diversos grados de gravedad, y los daños en la ciudad. Además, ha subrayado que los residentes de la zona han sido evacuados.

«El enemigo está intensificando el terror con misiles en Kiev. En particular, el uso de ataques balísticos contra la ciudad. La integridad y la infraestructura crítica de la ciudad y la vida de sus residentes dependen de la confiabilidad del trabajo de los (…) todas las Fuerzas de Defensa», ha manifestado.