Solo un día después de su anuncio, y unas horas más tarde de su jura del cargo, Ana Redondo García se ha estrenado este martes como ministra de Igualdad en el acto oficial de esta institución de conmemoración por el 25 de noviembre, Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres. Una iniciativa que este año entrega sus reconocimientos a figuras como Nevenka Fernández o la Selección Femenina de Fútbol por su labor de concienciación y resiliencia y que ha sido organizada por el equipo de Irene Montero al frente del Ministerio. Todo tras la ruptura evidente de Podemos con Sumar pero también con el PSOE.

Ana Redondo se estrena como ministra

«Viene la nueva ministra. Montero lo ha rechazado. Iba a participar pero finalmente ha comunicado que no». Se desconocía qué iba a hacer, pero estas frases comentadas por el equipo de organización del encuentro a ElPlural.com en el Auditorio Conde Duque de Madrid poco antes del inicio no solo han sido una confirmación, también una prueba evidente de que el enfado de Irene Montero es mayúsculo. Solo unas horas antes de este encuentro feminista la hasta este 21 de noviembre titular de Igualdad ha pronunciado un discurso de marcado peso político, con dardos a los dos socios de la coalición. 

Acompañada de todos los premiados, sendos referentes de la lucha contra la violencia hacia las mujeres y diferentes representantes de la política nacional y regional, como Francina Armengol, presidenta del Congreso; la vicepresidenta tercera de la Mesa, Esther Gil; o la portavoz de Sumar en la Cámara Baja, Marta Lois, Redondo ha participado por primera vez en un evento institucional de estas características, más allá de su jura del cargo ante el rey Felipe VI y de sus palabras al recoger el tradicional maletín en el seno del Ministerio. Además, en un día muy emocional y dando uno de los principales premios, a Nevenka Fernández.

Redondo ha pronunciado un discuso plagado de guiños al anterior equipo, liderado por Montero. «Es un día muy especial. El calendario ha querido darme la oportunidad de que sea mi primer acto en el reconocimiento de tanto talento, valor, fuerza y feminismo activo contra la violencia de género», ha comenzado la nueva ministra, que ha dicho no haber querido leer el discurso preparado ya que no lo ha preparado ella. «Somos todas eslabones de una misma cadena, que no se rompe, se refuerza y cada día es mas potente»; ha afirmado para sentenciar que este acto «reconoce el trabajo del ministerio de Irene Montero».

Redondo «reconoce el trabajo» del anterior equipo

«Ha trabajado mucho contra la violencia y por la igualdad», ha sostenido al lado de la delegada Vicky Rosell, con quien ha sostenido haber realizado la carrera juntas y estar unidas por el atril y este reconocimiento». «Sois nuestro ejemplo, inspiración, camino y fortaleza. Quiero reconocer el trabajo de todas las premiadas y decir que seguimos en la lucha, más importante que nunca por las represiones que nunca pensamos tener. La extrema derecha ha entrado en las instituciones y debemos salir el 25N a decir ‘no’ y ‘nunca más’. No vamos a dar un paso atrás«, ha sentenciado.

Según Redondo, «siendo fuertes, dialogantes, mirándonos a la cara y sabiendo que hay diferencias» se puede «avanzar y vencer a este problema enorme que nos amenaza», en referencia al impulso de Vox. Y, antes de dejar a Rosell intervenir, la ministra ha lanzado un aviso. «Mi puerta está abierta, ese ministerio es vuestra casa, no podemos tildar un ministerio con un nombre», ha dicho para apelar al «diálogo y la paciencia», pidiendo «días o semanas» para ponerse al día del trabajo del equipo, que ha dicho «hay mucha gente trabajando mucho tiempo y de forma admirable».

Un acto de Igualdad de Montero sin Montero

Las butacas vacías de la sala, en la que luce un 25N a escala humana de flores moradas y blancas, y a la espera del inicio del acto colgaba de uno de los asientos el cartel ‘Ministra de Igualdad’, sin especificar el nombre. Esa era la duda, qué iba a hacer Montero en una jornada en la que ya no es ministra pero en la que se otorgan reconocimientos y en la que se proyecta la campaña que su equipo ha preparado para la celebración de este día tan reseñable para el feminismo internacional. Especialmente en un año donde el número de asesinadas por esta se eleva hasta las 50 víctimas.

Los invitados y el staff lo comentaba en los asientos y en los pasillos. Y es que la expectación era máxima. Sin embargo, finalmente diversas fuentes han confirmado a este diario lo que unos minutos después se iba a constatar: la ausencia sonada de una de las protagonistas de la jornada, Irene Montero. Un gesto que puede significar dos cosas: la cesión total del testigo a la que ha sido designada su heredera política o la rabieta por no haber llegado como titular a este día tan especial para este área de trabajo del Gobierno. Montero parece haber dicho Se acabó, precisamente lema de la campaña.

Pese a su falta entre las bancadas Montero ha estado muy presente. Prácticamente los 12 galardonados con este reconocimiento han mencionado a la extitular de Igualdad al recoger la Menina. Algunos como Nevenka, Elsa Granados -premiada por la investigación para la transformación social y contra la violencia de género- o la activista Loueila Sid Ahmed han reivindicado la «valentía» tanto de su labor y experiencias propias como por parte del ministerio que ya queda atrás. Cabe destacar la aparente improvisación en el protocolo, dado que hasta este martes Redondo no tenía equipo de prensa ni agenda.

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