Después de la épica cuarta plaza de Adri Ben en 800 metros a tan solo ocho centésimas del bronce, la emoción no ha decaído este sábado en una extraordinaria penúltima jornada del Mundial de Atletismo con la confirmación del ‘doblete’ de Faith Kipyegon, con el ‘triplete’ de Noah Lyles y con un Armand Duplantis que se ha quedado muy cerca de elevar su propio récord universal un centímetro más hasta 6,23 metros.
El sueco se ha mostrado intratable pese a la firme oposición del filipino Ernest John Obienna, quien se ha unido al selecto grupo de los seis metros para establecer un nuevo récord de Asia, saltando a la segunda 5,75, 5,85 y 6,00.
Lejos de azorarse, ‘Mondo’ fue a lo suyo realizando el concurso que tenía planeado y franqueando a la primera 5,55 (se dejó medio metro), 5,85, 5,95, 6,00, 6,05 y 6,10. Esa necesidad de asegurar alturas para conquistar el título quizá le restó el milímetro que le faltó para seguir haciendo historia.
El sueco nacido en Estados Unidos situó 6,23 metros mientras la actividad seguía en el estadio. El primer nulo fue claro, pero el segundo daba a entender que podía estar en condiciones de lograr el primer récord universal de estos Mundiales.
Acababa de concluir en 1.500 femenino y Duplantis era el centro de atención de todo el estadio, como a él le gusta. La grada aplaudió tanto o más que cuando compite un atleta húngaro, el escandinavo corrió como si de Noah Lyles se tratase y voló por encima del listón… pero lo rozó y terminó cayendo. Así, el actual campeón olímpico logró su segundo oro seguido tras la plata de Doha con 6,10, seguido de Obienna con 6,00 y por el australiano Kurtis Marschall y el estadounidense Chris Nilsen, bronce ambos con 5,95.
La otra gran estrella de la jornada fue Kaith Kipyegon, quien vive una temporada de ensueño después de batir en apenas dos meses los récord mundiales de 1.500, la milla y 5.000. Con el oro en 1.500 ya en el bolsillo, la keniana partía como favorita en las 12 vueltas y media con la neerlandesa Sifan Hassan y la ‘armada etíope’ como grandes rivales.
La prueba transcurrió a un ritmo medio y todo se decidió en el último 400. Ahí impuso su ley la africana con un cambio sostenido y un aceleró en la parte final de la contrarrecta. Parecía que estaba al alcance de la ‘oranje’, pero la bicampeona olímpica del ‘milqui’ Kipyegon no vaciló para reinar con 14:53.88, seguida de Hassan (14:54.11) y de la también keniana Beatrice Chebet (14:54.33).
El que faltaba era Noah Lyles, quien aspiraba al tercer triplete masculino estadounidense de la historia de los Mundiales (antes lo lograron Maurice Greene en Sevilla’99 y Tyson Gay en Osaka’07) tras sus victorias en 100 y en 200 metros. Los estadounidenses eran claros favoritos y no fallaron en las entregas, con Chris Coleman, el destronado Fred Kerley y el semidesconocido Brandon Carnes.
El nuevo ‘rey’ de la velocidad realizó una sensacional última posta y nada más cruzar la meta marcó un tres con los dedos (37.38). Sí, tres oros. Para quitarse el sombrero. Liderada por el campeón olímpico Jacobs y por Tortu, una colosal Italia se colgó el bronce (37.62) y el bronce fue a parar a Jamaica (37.76), muy lejos de su dominio en la ‘era Usain Bolt’.
En féminas, una mala entrega de Shelly-Ann Fraser-Pryce tras su tercera posta dio alas a Estados Unidos, que con Sha’Carri Richardson mantuvo la primera plaza pese al acoso de Shericka Jackson y dio a la renacida velocista su tercera presea (dos oros y un bronce). Las norteamericanas se impusieron con 41.03, 18 centésimas menos que Jaiamca con Gran Bretaña bronce (41.97).
En cuanto a las otras finales, el festival estadounidense lo completó Chase Ealey en peso con 20,43, superando a la canadiense Sarah Mitton (20,08) y a la china Lijao Dong (19,69), misma marca que dejó sin medallas a la lusa Auriol Dongmo, mientras que el nuevo hombre más completo del planeta es el canadiense Pierre Lapage cerca de los 9.000 puntos en el decatlón con 8.909 puntos, seguido por su compatriota Damian Warner (8.804) y por el granadino (de la isla) Lindon Victor con 8.756.
