Zona Militar informa que a Armada Española confirmó en sus comunicaciones oficiales la incorporación del sistema de rescate de la OTAN NSRS a bordo del futuro BAM-IS Poseidon, un elemento que reconfigura el papel del buque dentro de las misiones de salvamento y apoyo subacuático. Navantia detalló el avance durante el acto de bajada a dique celebrado en Puerto Real, un hito que sitúa el proyecto en el tramo crítico de ensamblaje estructural.
El Poseidon, diseñado como sustituto del veterano Neptuno A-20, combina la lógica BAM con una arquitectura modular de nueva generación. Su casco de 5.000 toneladas y la cubierta de trabajo de 400 m² permiten una integración de módulos poco habitual en buques de acción marítima españoles, un enfoque que según ingenieros del programa responde a las necesidades operativas derivadas de la llegada de los submarinos S-80 Plus y la ampliación de su abanico de misiones.
¿Qué aporta el BAM-IS Poseidon a la capacidad subacuática española?
Un casco preparado para operar como MOSHIP OTAN
| Parámetro | Valor |
|---|---|
| Desplazamiento | 5.000 t (configuración plena) |
| Certificación | MOSHIP OTAN para operar el sistema NSRS |
| Superficie de cubierta | 400 m² para módulos especializados |
La certificación MOSHIP es el detalle oculto que marca la diferencia: sitúa a España entre los países capaces de acoger el paquete completo de intervención del NSRS, algo que fuentes militares citadas en informes del CRS en 2023 describían como “capacidad crítica en escenarios de rescate de alta profundidad”. El Poseidon se convierte así en nodo de interoperabilidad OTAN en misiones donde cada minuto cuenta.
Integración directa con el programa S-80 Plus
- El BAM-IS se coordina con la Oficina de Programas de Submarinos, que maneja un presupuesto superior a 4.000 millones de euros en el ciclo S-80 Plus.
Un nuevo rol estratégico en el Mediterráneo occidental
El segundo vector que explica el avance del Poseidon es su función como plataforma de intervención rápida en accidentes, naufragios y misiones de monitorización del patrimonio sumergido. Mandos de la OTAN citados indirectamente por el Pentágono en 2022 señalaron que la disponibilidad de buques MOSHIP “reduce la ventana de riesgo en incidentes con tripulaciones atrapadas” y desplaza capacidades críticas hacia el flanco sur aliado. Para España, la combinación de Navantia, NSRS y la llegada de los S-80 Plus sitúa al Poseidon como pieza clave de un ecosistema subacuático que crecerá durante la próxima década.











