España tiene prisa, mucha prisa por meterse en la final de la Nations League. Goleó con extrema autoridad a Suiza gracias a la dirección de una inspirada Alexia Putellas (dos goles y una asistencia), por lo que si gana a Italia el próximo 1 de diciembre entrará en la fase final. Firmó una goleada de escándalo (1-7) que prolonga su excelente química de juego y eficacia: 11 remates, ocho a puerta, siete tantos. Una lección de contundencia.

La noche en que Aitana abandonó el lujo de la gala del Balón de Oro para sentirse, de nuevo, futbolista en un grupo donde Jenni Hermoso recuperó su condición de titular. Un equipo, el de Montse Tomé, que está completando un torneo formidable: cuatro partidos, cuatro victorias, 12 puntos de 12 posibles y las campeonas del mundo honran a cada minuto esa estrella que lucen en su pecho.

De la alfombra roja de París al césped suizo. No hay tregua para Aitana Bonmatí, que fue aplaudida por el público de Zurich cuando fue sustituida en el tramo final de la segunda mitad.

Del beso a un Balón de Oro, que la convierte en leyenda, en la inolvidable noche francesa a esquivar la túpida estructura defensiva helvética. No hay descanso tampoco para la nueva España de Montse Tomé, una selección que defiende corona. Y una selección que tiene prisa por liquidar los partidos para aumentar su idilio con la felicidad en el campo.

Primer córner a favor, primer gol español. Una excelente asistencia de Tere Abelleira desde la esquina izquierda del ataque permitió detectar la figura de Oihane Hernández en el segundo palo. Estaba solo en la frontal del área pequeña. Sola porque Suiza, en un inexplicable ejercicio de candidez, se olvidó de defender. Y sola, todo hay que decirlo, porque el trabajo previo en la pizarra había permitido liberar a la jugadora del Madrid, quien cabeceó con tanta astucia como precisión.

Todo el juego a balón parado de España, ya fueran faltas laterales o córners, eran responsabilidad de Tere Abelleira, quien tiene el GPS del área rival en su mente. El partido no tuvo guión. Resultó ser un discurso sin fin del ataque español. Ni un cuarto de hora y ya ganaba 0-2.

La velocidad de Salma Paralluelo

Excelente la aceleración de Salma Paralluelo rasgando la transparente defensa suiza para acercarse a la línea de fondo y centrar con inteligencia hacia atrás donde Alexia Putellas se asomó, de nuevo en solitario, al área pequeña para sentenciar el encuentro. Si es que hubo encuentro, claro. ¡Qué no lo hubo!

Salma Paralluelo. Sefutbolfem


Aunque Suiza, a través de una internada de Lehmann por la banda derecha, quiso dejar constancia de que no había claudicado. Pero su disparo encontró la resistencia de Misa Rodríguez, la portera del Madrid que empezó el Mundial de titular aunque terminó perdiendo su silla ante la azulgrana Cata Coll. Dos buenas apariciones de la guardameta blanca frustraron el tímido intento de reacción suizo.

Tere Abelleira siempre asiste bien

Igual de bien que empezó la primera parte para España arrancó la segunda mitad. Y de idéntica forma. Córner servido por Teresa Abelleira, otra asistencia desde el banderín, para ser rematado en esta ocasión por María Méndez, la jugadora del Levante. Así se agotó el partido porque a la hora ya iba el 0-3 iluminando el marcador, ampliada la renta con el penalti anotado por Alexia Putellas.

O sea, tres de los siete goles de España llegaron en acciones a balón parado (dos córners y un penalti). Y eso que la selección de Montse Tomé se desconectó del partido durante 120 segundos permitiendo el tanto suizo de Alayah Pilgrim, futbolista del Zurich. Tan fugaz como engañosa resultó esa caída porque terminaron marcando hasta tres tantos más en los últimos 20 minutos del choque.

Entró en el campo (m. 66) y marcó (m. 68) aprovechando un boquete de la defensa española y una mala interpretación de Misa Rodríguez. Se quedó la portera del Madrid en tierra de nadie abriendo la posibilidad del tanto helvético.

La noche de Alexia

De inmediato, Athenea del Castillo devolvió el orden al partido con un cabezazo que dio más brillo al delicado centro de Alexia Putellas, quien compareció con grandeza en la lluviosa noche de Zúrich. Dos goles y una asistencia certificaron el excelente encuentro de la segunda mejor jugadora del mundo. La que cedió el lunes el trono a Aitana Bonmatí, mientras Peng, la meta suiza, veía como los dos tantos de Athenea del Castillo se le colaba entre sus piernas uniéndose Maite Oroz al festival en el tiempo añadido. 1-7, queda todo dicho.

Ficha técnica

1- Suiza: Peng, Crnogorcevic, Bühler, Calligaris, Riesen, Sow, Wälti, Reuteler, Lehmann, Bachmann y Piubel. Entrenadora: Inka Grings Cambios: Vallotto por Wälti (m. 62); Aigbogun por Crnogorvecic (m. 62); Stierli por Calligaris (m. 62); Pilgrim por Lehmann (m. 66); Terchoun por Sow (m. 86).

7- España: Misa Rodríguez, Oihane Hernández, Méndez, Aleixandri, Ona Batlle, Aitana, Teresa Abelleira, Alexia Putellas, Lucia García, Jenni Hermoso y Salma Paralluelo. Entrenadora: Montse Tomé Cambios: Athenea del Castillo por Lucia García (m. 64); Inma Gabarro por Aitana Bonmatí (m. 77); Olga Carmona por Oihane Hernández (m. 77); Maite Oroz por Jenni Hermoso (m. 84)

Goles: 0-1, Oihane Hernández (m. 4); 0-2, Alexia Putellas (m. 11); 0-3, Méndez (m. 56); 0-4, Alexia Putellas (m. 62); 1-4, Pilgrim (m. 68); 1-5, Athenea del Castillo (m. 72); 1-6, Athenea del Castillo (m. 89); 1-7, Maite Oroz (m. 90+3)

Árbitra: Iuliana Demetrescu, rumana.

Tarjetas amarillas: Crnogorcevic (m. 8);