Uno de los cultivos que más está experimentando los efectos del cambio climático actual es el viñedo. Es manifiesto el adelanto en el calendario de la recolección de la uva: unas semanas o incluso un mes en algunas zonas productoras de nuestro país. Lo que conlleva una reorganización general de todo el proceso de tratamiento en bodega hasta la venta final del producto. Más temperatura en los meses de verano, más evapotranspiración potencial, supone más concentración de azúcares. Desde hace años el sector viti-vinícola está trabajando en la adaptación a la nueva realidad climática. Algunas empresas están trasladando zonas de producción a áreas menos calurosas, incluso piedemontes elevados de montaña. Se están cambiando variedades por otras más resistentes al calor y a la mayor irregularidad de las lluvias. En definitiva, se demuestra que cuando hay voluntad se pueden desarrollar acciones para proteger y potenciar una producción agrícola tan importante para nuestro país como el vino. Un último paso en este sentido está siendo la implantación de sistemas de producción de energía solar (placas solares) en convivencia con las vides en las parcelas de cultivo. Comienza a haber ejemplos muy loables en diferentes zonas productoras de España. He tenido ocasión recientemente de visitar una de estas experiencias, en Novelda, en las instalaciones de Casa Sicilia, que regenta con inteligencia la familia Arias. Es un ejemplo a seguir en otras explotaciones del mediterráneo español, donde abundan las horas de sol y la demanda de energía es alta. La familia Arias tiene claro la filosofía de este proyecto: lo primero son las viñas, la producción del vino de calidad que se obtiene campaña a campaña. La producción energética es complementaria. Pero sabemos que, en el contexto actual de cambio climático, dentro del proceso que vivimos de transición energética, poder combinar mitigación y adaptación al cambio climático en un ejemplo de convivencia de acciones que respeta la tradición cultural y el patrimonio paisajístico del viñedo, es una acción loable que merece destacarse. Felicidades a la familia Arias y a su grupo Vectalia que engrandece con su labor diaria a la provincia de Alicante.














