El Horneo EÓN Alicante vuelve a jugar este fin de semana a domicilio y lo hace en la pista del REBI BM Cuenca, en el partido correspondiente a la quinta jornada de la Asobal (20:30h). Para Fernando Latorre, “se trata de una salida complicada”. “Cuenca mantiene su línea de defensa y portería de toda la vida: fuerte, intensa y en su casa toda vía más. Una portería que está impresionante en este inicio. Se va por encima de las 13, 14 paradas, apoyada de una defensa dura. Creo que esa es la calve de Cuenca. Además, tiene jugadores de peso como Pizarro o sus centrales con lanzamientos exteriores”, así describe el técnico alicantino a su rival de esta jornada.
Aunque sea un rival “duro”, Latorre ve “en cierta parte, un lado positivo”. “Bueno para nosotros y malo para ellos es que tienen bastante jugadores tocados y eso, a lo mejor, puede igualar las fuerzas. Pero, aunque tengan lesionados también es cierto que han demostrado de lo que son capaces. Ya ganaron en su casa a Logroño”.
Y es que, para el alicantino, otro de los puntos fuertes de los conquenses es su pabellón: “El Sargal es una de las pistas más complicadas de la competición”. “Aún así vamos a ir a intentar ganarles. Hemos aprendido de estos últimos partidos. Sin embargo, si se pierde el sábado, volveremos a aprender para ir a más. Pero ir a ganarlo, por supuesto que vamos a ir”.
Los errores
En cuanto a la pregunta de qué ha fallado en estos últimos encuentros, Latorre es claro: “hemos analizado todo porque en Logroño nos faltó de todo. No estuvimos bien en ningún aspecto del juego”.
“Si fuera de casa defensivamente y en portería estás bien, tus opciones se multiplican. En casa puedes sumarle la afición, pero fuera de casa no puedes vivir de meter 38 goles. Tienes que conseguir que tu defensa y tu portería estén bien”, añade.
Aprendizaje
Si algo destaca Fernando Latorre esta semana tras la derrota en Logroño es la importancia de ser autocríticos y analizar lo ocurrido. “Antes de nada hay que hacer autocrítica. Hay que ser conscientes que aun no estamos bien. No estamos logrando el nivel de juego que queramos, tanto ofensivo, como defensivo y en portería. Entrenamos bien, estamos todos bien, pero la realidad es que es un equipo nuevo en una categoría nueva, con 12 jugadores nuevos y hay que pagar este peaje. Solo llevamos 2 meses juntos y hay que construir todo, muchas ideas”, explica.
“Cuando preparas el partido, ves que estamos bien y que tienes opciones, pero el partido y la liga te ponen en tu sitio y lo que crees que tienes bien trabajado y ordenado, todavía le falta solidez. No estamos mal, pero aún le falta ese punto para competir en una liga profesional como Asboal y tenemos que tener todo mucho más asentado y metido en las venas”, añade.
“Queremos y vemos que podemos, pero la realidad es la que nos pone en el sitio. Jugamos con equipos que son muy grandes y nosotros tampoco estamos al nivel que queremos o que aparentamos estar”.
Los rivales
A pesar de los últimos resultados, Latorre destaca el inicio del calendario. “La parte positiva es que estamos enfrentándonos a equipos de la parte alta, muy consolidados y que están siempre ahí arriba y se enfrentan a un equipo recién ascendido como nosotros. Es bueno que queramos ganarles ya, pero la realidad es que eso requiere tiempo, paciencia, trabajo y humildad. Es bueno que queramos competirles y vernos capaces y estoy seguro que vamos a ir de menos a más. Pero a nadie le gusta perder y duele”.
“Nos queda mucho rodaje y trabajo y semana a semana hay que aprender de los errores que estamos cometiendo para ir mejorando y para cuando lleguemos a estos partidos ser competitivos, al menos en casa. El objetivo es mantenernos y si lo conseguimos, mirar para arriba”, sentencia.