Es un hecho que el Valencia CF no está siendo capaz de arrancar esta temporada. Solamente ha conseguido un tercio de los puntos en disputa (7 de 21), está dando muy malas sensaciones sobre el terreno de juego y las estadísticas hablan por sí solas. En siete jornadas no ha sido capaz de encontrar ni el ‘once tipo’ ni tampoco un modelo de juego en el que se sienta cómodo, sobre el que pueda crecer y a partir del cuál crear su identidad como equipo.
A lo largo de estos siete partidos, Carlos Corberán no ha repetido un solo once titular y ha cambiado también el sistema táctico en busca de soluciones para un equipo que no arranca y que navega en la indefinición. Entre los motivos está, obviamente, la pérdida de figuras clave que no tienen un reemplazo del mismo nivel como Enzo Barrenechea, el bajón de futbolistas como Dimitri Foulquier, Javi Guerra o André Almeida (impoortantes en el mejor Valencia de Corberán y miembros del once habitual del mejor Valencia de Corberán) y el escaso impacto de los fichajes.
Una serie de factores que han hecho muy complicado no solamente dar continuidad al equipo de la temporada pasada, sino también armar una nueva alineación de referencia… y no precisamente porque la competencia esté muy cara, si no porque las diferentes alternativas en el centro del campo y para acompañar al delantero centro no están funcionando.
Valencia-Oviedo en Mestalla / JM LOPEZ
Empezó con Raba en la mediapunta
La puesta de largo del Valencia CF, todavía sin Arnaut Danjuma en el equipo titular, fue la de jugar con una especie de 1-4-2-3-1 en la que Dani Raba fue el mediapunta y su rendimiento fue bueno a nivel individual, dando la asistencia del gol de Diego López. El equipo, no obstante, mostró la inconsistencia habitual y la Real Sociedad se le fue apoderando. El equipo fue el siguiente: Agirrezabala, Foulquier, Tárrega, Copete, Gayà, Pepelu, Javi Guerra, Luis Rioja, Diego López, Raba y Hugo Duro.
Ya con Danjuma ‘rodado’ en los entrenamientos, en Pamplona la apuesta fue la de alinearlo como ‘9’, pero con la expulsión de Gayà el equipo fue incapaz de competir frente a Osasuna. Este escenario, además, supuso el ‘adiós’ de Raba -que fue cambiado tras la roja y que no ha vuelto a ser el mismo-. El once fue: Agirrezabala, Foulquier, C. Tárrega, Copete, Gayà, Pepelu, Javi Guerra, Diego López, L. Rioja, Raba y Danjuma.

Dani Raba encara a un rival durante el encuentro / Manuel Bruque
Contra el Getafe… segundo punta y victoria
Para el tercer partido, Corberán optó por un ‘9’ puro de nuevo como Hugo Duro e introdujo la figura del segundo delantero en la figura de Diego López en lugar de apostar por un mediapunta como Raba, además de darle a Bapstiste Santamaria su primera titularidad en el pivote junto con Javi Guerra haciendo la labor de ‘8’. El equipo jugó su mejor partido -aprovechando también el desgaste de un Getafe de 12 fichas- hasta la fecha con la entrada de Mouctar Diakhaby al equipo, que marcó y le dio seguridad al equipo atrás. El once fue: Agirrezabala, Foulquier, Tárrega ©, Diakhaby, J. Vázquez, Santamaria, Javi Guerra, L. Rioja, Diego López, Danjuma y Hugo Duro.
Defensa de tres y humillación en Barcelona
Tras ese encuentro, Corberán optó por plantear el partido contra el Barça con cambios significativos en el planteamiento para tratar de adaptarse a las fortalzas del Barça, pero fracasó estrepitosamente. El equipo formó con defensa de cinco y fue humillado por el conjunto azulgrana, que circuló la pelota como quiso, encontró con suma facilidad los espacios y le endosó hasta seis goles. Un desastre de planteamiento y de actuación individual de los futbolistas. El once fue: Agirrezabala; Foulquier, Tárrega, Diakhaby, Copete, Gayà; Santamaría, Javi Guerra, Diego López; Hugo Duro y Danjuma.

Javi Guerra y Casadó, en la última visita del Valencia a Barcelona en la Liga, la de enero de 2025 / LaLiga
Frente al Athletic: mediapunta y ‘falso 9’
Después de la debacle, el planteamiento de Corberán cambió nuevamente encaminado hacia la defensa de cuatro e introdujo una variable nueva en ataque: juntar al mediapunta (Raba) con el falso ‘9’ (Danjuma). La primera parte del Valencia fue verdaderamente lamentable después de la debacle, la segunda mucho mejor y la expulsión del Athletic Club acabó de decantar la balanza a favor de los valencianistas, que acabaron controlando a placer. El once fue: Agirrezabala; Gayà, Diakhaby, Tárrega, Foulquier; Santamaría, Guerra; Rioja, Diego López, Dani Raba y Danjuma.
Contra el Espanyol: doble pivote defensivo y segundo punta
Con la siguiente salida hubo un nuevo cambio de planes. Esta vez se quedaría Javi Guerra en el banquillo y el que entró en su lugar fue Pepelu, formando con Santamaria una pareja de mediocentros de mayor contención y menor creatividad, apostando por hombres veloces arriba y, con ello, situando a Danjuma por detrás de Hugo Duro. Salió bien los primeros veinte minutos, pero el equipo se fue diluyendo hasta ‘acularse’ en su área y ceder al Espanyol el dominio y las ocasiones. El once fue: Agirrezabala; Gayà, Diakhaby, Tárrega, Foulquier; Santamaría, Pepelu; Rioja, Diego López, Danjuma; y Hugo Duro.

Filip Ugrinic en el partido contra el Espanyol / LaLiga
Y ante el Oviedo… volvió el trivote
Después de la mala imagen y empate final en Cornellà, Corberán optó por el sistema y los jugadores que más le acercaban al equipo de la temporada pasada con tres jugadores en el centro del campo por la incursión, por vez primera en la temporada, de André Almeida en el once del equipo. Pero ni su nivel fue bueno, ni Santamaria es Barrenechea ni Javi Guerra marcó diferencias ni Foulquier ejerció de comodín táctico. No se pareció en nada a ese Valencia y a pesar de un muy buen inicio, el equipo acabó siendo remontado con una imagen indigna.