El BBVA tiene hasta el próximo martes 23 de septiembre para mejorar las condiciones de su oferta de compra (opa) del Sabadell, pero insiste en que lo hará. Así lo ha sostenido su presidente, Carlos Torres Vila, en una entrevista en ‘Onda Cero’, en la que ha explicado que el plazo para elevar el precio es de hasta 10 días hábiles antes del fin del plazo de aceptación de la propuesta para los accionistas de la entidad catalana (7 de octubre) porque se aplica la legislación estadounidense en lugar de la española, al cotizar su banco en los dos países y ser la legislación norteamericana más restrictiva que la de España en este aspecto.
El banquero, sin embargo, ha reiterado como viene haciendo desde hace 16 meses que no tiene intención de mejorar la opa: «La oferta es enormemente atractiva y no vemos ninguna razón por la que cambiarla y, por lo tanto, no tenemos ninguna intención de hacerlo, aunque el mercado especule que puede ser así». El ejecutivo, en esta línea, se ha referido a las declaraciones previas del consejero delegado del Sabadell, César González-Bueno, que dio por sentado que su competidor va a mejorar la oferta.
El «juego» de su rival, ha apuntado Torres, pasa por instar a sus accionistas a retrasar la aceptación de la opa ante la expectativa de una mejora de precio y con el objetivo real de que finalmente no acepten la propuesta del BBVA. «Es un poco el juego, pero nosotros no estamos en ese juego. Tenemos una oferta que es la que, es enormemente atractiva. Quizá todo cuadre cuando sea definitiva porque sea imposible cambiarla«, ha apuntado, en referencia a esa fecha del 23 de septiembre.
Fin de la prima negativa
El Sabadell, así, vale en bolsa actualmente en torno a un 9% de lo que le valora la opa, lo que implica que un accionista obtendría hoy un rendimiento mayor vendiendo sus títulos en el mercado que aceptando la oferta del BBVA. Esa diferencia se debe en parte a los inversores que esperan una mejora de la oferta y lo que sostiene la entidad de origen vasco es que dicha prima negativa desaparecerá una vez pase el día límite para elevar el precio sin que dicha mejora se haya producido. «Ese jugo desaparecerá y convergerán los dos precios», ha mantenido Torres.
El banquero también ha negado que tenga la intención de rebajar el mínimo de acciones del Sabadell con que se conformaría para considerar un éxito la opa del 50% al 30% (descontada las acciones propias en manos del banco): «El hecho de que exista la posibilidad legal no significa que se vaya a hacer uso de ella, ni muchísimo menos». Además, ha reconocido que, si se quedase por debajo del 50% y aceptase bajar el umbral al 30%, tendría que lanzar una segunda opa en efectivo por el resto de las acciones, pero ha afirmado que sería al mismo precio de la primera opa, de manera que los inversores no lograrían un rendimiento mejor.