Que se mueran los feos, de Los Sirex, salió publicada en 1965. Sesenta años después, la canción sonó con fuerza en la plaza de María Pita ante cientos de personas que se entregaron a bailar con la nostalgia.
Este homenaje al rock and roll, en el que también participaron Los Rebeldes, fue una invitación al recuerdo. Entre el público, muchos recordaban haber escuchado esas canciones de jóvenes en guateques. Sonaron (y fueron coreadas) El tranvía, Qué es eso rock and roll, Los sabes o Qué bueno, qué bueno. Por supuesto, no faltó Que se mueran los feos, la que muchos esperaban. El cantante, Antonio Miquel Cervero, conocido como Leslie, bromeó con que cuando fue a la clase de música de su nieta a contar la historia del grupo no le dejaron cantar esa canción. «Me dijeron ‘pero cómo se lo vamos a explicar a los niños’», contó entre risas.
En el público hubo muchas sonrisas, muchos aplausos, muchas fotografías y también muchas risas con alguna broma del líder de Los Sirex, que aseguró que tenían «permiso hasta las tres de la mañana». «No sé si aguantaréis. Nosotros no», dijo.
Sin embargo, contaban con un apoyo incondicional para seguir la fiesta: Los Rebeldes. La banda de Barcelona subió a continuación al escenario y ayudó a seguir con este viaje por el pasado con canciones que han marcado a algunas generaciones. En su setlist figuran temas como Mediterráneo, Mi generación y Corazón de Rock&Roll.
Seguro que más de uno, después de estos bailes, contó alguna anécdota de aquellos años.