Los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) publicados este jueves han arrojado un escenario histórico en España. Por primera vez se han superado los 22 millones de ocupados, mientras la tasa de paso, que ha caído al 10’21%, es la menor tasa desde el año 2008.
Unos datos que ha aprovechado el ministro de Economía, Carlos Cuerpo, para sacar pecho afirmando que «la economía española avanza con fuerza» creando «empleo de calidad». El matiz lo ha puesto la vicepresidenta y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, que en una entrevista en la Cadena Ser donde, a pesar de reconocer que es «una noticia muy positiva», ha llamado a avanzar para «trasladar la recuperación a los salarios»
Esa es la línea más crítica, precisamente, que ha remarcado el doctor en Economía y catedrático, Santiago Niño Becerra en una publicación en la red social X este pasado miércoles, con una historia personal que muestra la cara b de los buenos momentos que vive la economía macro en nuestro país.
«Contribuye negativamente a la productividad»
«Me lo han contado hace un rato la madre de una antigua alumna (ahora 29) con la que he coincidido«, comenzaba el aplaudido hilo en X el economista, que ha logrado un gran impacto. «Lleva trabajando y residiendo ocho años en Londres. Profesionalmente está encantada y su remuneración es cuatro veces: ¡cuatro!, mayor de la que percibiría en Barcelona realizando un trabajo equivalente», exponía.
Una diferencia de precios que se suele contestar comparando el nivel de vida entre ambas ciudades. A ello también responde Niño Becerra: «El nivel de precios de Londres no es cuatro veces el de Barcelona; y allí tiene unas expectativas profesionales que aquí no tendría», proseguía.
«Lo dicho: muchas/os de los/las jóvenes buenas/os se van y vienen peores. España se descapitaliza en términos de capital humano, lo que contribuye negativamente en la productividad. Mal. Muy mal», concluía.