Para el actor con enanismo Emilio Gavira Tomás, el caso de las personas con esa misma condición contratadas para la fiesta de cumpleaños de 18 años del futbolista del F.C Barcelona, Lamine Yamal, se debe investigar porque aún no se sabe verdaderamente en qué consiste el trabajo para el que fueron contratados.
«Si fueron humillados o los trataron mal, pues la autoridad competente tiene que atenderlo y protegerlos», señala Gavira, de 60 años. Él espera que estas personas no hayan sido obligadas a hacer algo «que va en contra de su salud, aunque les paguen. Hay cosas que no se pueden hacer».
La fiesta de 18 años de Lamine Yamal ha generado una gran controversia mediática. La celebración tuvo lugar en una exclusiva finca del Garraf, valorada en 40.000 euros por semana, con una estética inspirada en el universo «gánster glas», mezcla de los años veinte y el lujo contemporáneo.
Lamine Yamal junto a sus invitados en su fiesta de 18 años.
Entre los asistentes, destacan figuras del panorama musical como Bizarrap, Quevedo, Bad Gyal, Lola Índigo, Ozuna, Ryan Castro y JC Reyes, además de El Alfa, quien sorprendió al jugador con un collar de diamantes valorado en 400.000 dólares. También llegaron «chicas de imagen» y personas con enanismo.
El Ministerio de Derechos Sociales ha pedido a la Fiscalía, al Defensor del Pueblo y a la Oficina de Lucha contra los Delitos de Odio investigar si se vulneró la ley de discapacidad, que prohíbe espectáculos de burla o que denigren a las personas con discapacidad.
Esto fue anunciado después de que la Asociación de Personas con Acondroplasia y Otras Displasias Esqueléticas (ADEE) indicó que va a denunciar a Lamine Yamal por incluir a personas con enanismo en su fiesta.
Según dijeron en un comunicado, quieren «salvaguardar la dignidad de las personas con discapacidad» y consideran que esas prácticas «vulneran no solo la legislación vigente, sino también los valores éticos fundamentales de una sociedad que se pretende igualitaria y respetuosa».
La Ley General de Derechos de las Personas con Discapacidad (Real Decreto Legislativo 1/2013, Art. 18) establece que «quedan prohibidos los espectáculos o actividades recreativas en que se use a personas con discapacidad o esta circunstancia para suscitar la burla, la mofa o la irrisión del público de modo contrario al respeto debido a la dignidad humana».
Emilio Gavira, que también es cantante de ópera, detalla que por ahora se desconocen los detalles de lo ocurrido en la fiesta de Yamal, pero opina que «sería muy triste que (Lamine Yamal) lleve damas de compañía y a los enanos para que se rían de ellos».
Los trataron «bien»
Las personas con enanismo que fueron contratadas para la fiesta de Lamine Yamal son presuntos animadores, y uno de ellos, que prefirió mantenerse en el anonimato, intervino en el programa Versió RAC1 para dar su punto de vista sobre la polémica.
Sus declaraciones fueron claras y directas: «Nadie nos faltó el respeto, que nos dejen trabajar en paz. No entiendo por qué se le da tanto bombo. Somos gente normal, que nos dedicamos a lo que queremos, de una forma absolutamente legal».
Las personas con enanismo llegando a la fiesta de Lamine Yamal.
El afectado explicó que la polémica se desató tras la denuncia pública de la ADEE, pero defendió con firmeza su derecho a trabajar. Dijo que no estaba de acuerdo con la denuncia hecha por esta asociación porque lo que hacen es «humillar a las personas con enanismo. Desde hace un par de años esta gente nos está perjudicando, quieren prohibir un trabajo que nos gusta, y en ningún caso han ofrecido trabajo o cursos a la gente afectada».
«Desde hace un par de años esta gente nos está perjudicando, quieren prohibir un trabajo que nos gusta, y en ningún caso han ofrecido trabajo o cursos a la gente afectada. Trabajamos de animadores ¿Por qué no podemos hacerlo? ¿Por nuestra condición física?», dijo.
También fue crítico con la directiva de la asociación, señalando a su presidenta Carolina Puente: «Hay una nueva presidenta que se siente acomplejada y nos quiere joder a los demás».
En España hay varias agencias que ofrecen servicios de personas con enanismo para entretenimiento. Algunos se disfrazan de superhéroes, de animales o usan trajes extravagantes. Incluso hacen de strippers en despedidas de solteras.
«Es muy triste que tengas que hacer eso para ganarte la vida» valora el actor Gavira. Sin embargo, también menciona que debe verse con normalidad que personas con enanismo se dediquen a esto así como lo hacen otras personas que no tienen esta condición. «Es un tema de la libertad de cada uno«.
Un tema complejo
El actor Emilio Gavira sostiene que este es un tema polémico y no es tan fácil de entender. «Aunque ellos quieran hacerlo, debería estar el Estado (protegiéndolos) porque también un obrero podría subirse a un andamio sin arnés de seguridad y decir que se sienten seguros subiendo al andamio sin seguridad».
Lamine Yamal en su fiesta.
Por otro lado, el actor insiste en que es necesaria una investigación para conocer las tareas para las que verdaderamente fueron contratadas las personas. «Si van ahí a hacer de camareros, pues ¿por qué no?»
Estas personas pueden dedicarse a trabajos como otras, explica Gavira, pero el problema es que sean humillados por su condición. Por ello, el actor se pregunta: «¿Pondrías a chicos con síndrome de down a hacer estas cosas? Estoy convencido de que no. Es muy triste que la humillación y la mofa de gente que tiene una dificultad física, que a alguien le pueda hacer gracia».