Ramón García Presentador del ‘Grand Prix del Verano’. / Redacción
Ramón García (Bilbao, 63 años) ya está de nuevo en nuestras casas. Este mes volvió a TVE el Grand Prix del Verano, un programa ligado a uno de los presentadores más queridos por los españoles y de los pocos indispensables para pasar las vacaciones en familia.
El vasco lleva desde 1991 paseándose por nuestro salón intentando hacernos reír a base de concursos y celebrando el Año Nuevo sin atragantarse con las uvas ni una sola de las veinte Campanadas que ha presentado. Es lógico que se haya ganado el cariño de millones de personas, niños que ya no lo son tanto y que ahora tienen sus propios hijos, los que ahora disfrutan de nuevo del Grand Prix.
Su voz es inconfundible. Risueño, algo picarón, no se le ha visto cabrearse jamás. Mentira. En 2022, durante la emisión del programa que presentaba en Castilla-La Mancha Televisión, En compañía, se topó con una señora al otro lado de la línea telefónica con muy pocas ganas de ganar el jamón que regalaban cada tarde. «A mí no me interesan estas tonterías», le dijo. Entonces descubrimos que no era horchata lo que corría por las venas de Ramón. «Ni a mí tampoco usted. Adiós señora, buenas tardes. Que gente más maleducada hay, macho. Que asco. Es que hay gente faltona, coño. Con todo el respeto y el cariño. Váyase a tomar por culo», le soltó. La señora ya había colgado, pero seguro que le llegó el mensaje.
Quitando eso, con Ramón García es imposible enfadarse.
Entre 1995 y 2023 ha dado las campanadas una veintena de veces, casi todas en TVE y casi siempre con capa española. Sabe el funcionamiento del reloj de la Plaza del Sol mejor que el suyo y nunca se ha equivocado con los cuartos. Alguna vez que no han contado con él en la pública le ha puesto los cuernos con Antena 3 y con Twitch, de la mano de Ibai Llanos en esta última plataforma. En 2018, la empresa Estrella Galicia lo fichó para tomarse las uvas en streaming a través de sus perfiles en YouTube, Facebook y Twitter. Más de 15.000 usuarios se conectaron a la emisión, superando en audiencia a algunos canales autonómicos.
Le han acompañado Ana Obregón, Anne Igartiburu y hasta la ya fallecida Raffaella Carrà, aunque las mejores migas las hizo con la primera, que siempre le llamó Ramontxu.
Con ella presentó el exitoso programa ¿Qué apostamos? entre 1993 y 2000. ¿Qué boomer o millennial no recuerda a la pareja dándose una ducha de agua fría al final de la noche? La Obregón, no obstante, solo duró cinco temporadas. Después dio paso a otras copresentadoras, entre ellas, su archienemiga Antonia Dell’Atte. Sea quien sea quien tuviera a su lado, Ramón García representa a aquella televisión que lograba reunir alrededor del televisor a toda la familia, con los padres en el centro del sofá y los niños pequeños sentados demasiado cerca de la pantalla. Era el final de una época.
Fue en 1995 cuando empezó a combinar este concurso con el Grand Prix del Verano, un auténtico show para todos los públicos en donde participaba hasta una vaquilla de verdad. En aquellos tiempos todavía era posible. Duró hasta 2005 y volvió en 2023, con una ley de bienestar animal que obligó a prescindir de ella. «Yo soy partidario de la vaquilla de verdad porque en los pueblos se sigue haciendo eso. España es un país rural», dijo abiertamente durante la presentación del nuevo formato. En la actualidad hay un muñeco que hace de vaquilla y al que llama María Fernanda. «¿Por qué seguimos viendo vaquillas en los pueblos y no lo podemos ver en la televisión pública?», se preguntaba.
El Grand Prix de este 2025 sigue sumando novedades. Se estrenó la cómica Lalachus, aquella que tantas ampollas levantó el pasado 31 de diciembre en el entorno de la Asociación Católica de Propagandistas por sacar una estampita del Sagrado Corazón de Jesús con la imagen de la vaquilla del Grand Prix. «Prefiero no decir ni mu, por si acaso», dijo Ramón García tras la polémica, pero por dentro estaba aplaudiendo. Meses después acudió a La Revuelta, donde colabora Lalachus, para pedirle de rodillas que copresentara el programa con él este verano. Dicho y hecho.
La nueva pareja televisiva no dudó en hacer un guiño a la polémica de Nochevieja al presentar una de las novedades de esta edición: la ‘Vaca dorada’, una carta que los equipos podrán usar una vez y con la que podrán ganar puntos extra. En el momento de sacar la carta, el presentador gritó «¡Lala, no! ¡Con el pifostio que liaste». Todo quedó en un susto para Abogados Cristianos, pero queda todo un verano por delante.