Tenis
WIMBLEDON
El murciano se vio sorprendido por el gran inicio de partido del ruso, pero volvió a hacer gala de su capacidad de reacción para llevarse la victoria (7-6, 3-6, 4-6, 4-6).
El partido más difícil que ha tenido Carlos Alcaraz hasta la fecha ha tenido el mismo resultado que los anteriores: victoria para el vigente campeón de Wimbledon. El español se impuso a Andréi Rublev en cuatro sufridos sets y se cita con Cameron Norrie en cuartos de final [Narración y estadísticas del partido].
La exigencia en este momento del torneo es cada vez mayor y Carlitos comprobó de primera mano que el tenista ruso era el rival más difícil al que se había enfrentado hasta ahora. Rublev le disputó un partido de tú a tú a Alcaraz, consiguiendo encontrarle las cosquillas a su juego.
El vigente campeón de Wimbledon se encontró al otro lado de la pista un rival muy diferente al que ha tenido hasta ahora. Andréi quería jugar y no le importó pelotear, mientras que la falta de acierto de Alcaraz le llevó a querer terminar los puntos de manera rápida.
Carlos Alcaraz volvió a hacer gala de su enorme capacidad de reacción y tras perder el primer set en el tie-break, se recompuso en la segunda manga y, sin esperarlo, le rompió el servicio a Rublev en un momento decisivo. Dominó en el tercero e hizo lo propio en el cuarto set.
La rebelión de Rublev
No solo para Alcaraz, sino también para los espectadores presentes en la central del All England Club fue toda una sorpresa el inicio de partido que ejecutó Andréi Rublev. El ruso aumentó de manera notable su porcentaje de acierto en el primer saque (del 64 al 77%) y empezó dominando el partido.
No le afectó al tenista su bagaje contra los cinco primeros del ranking en un Grand Slam -nunca les ha ganado-, y después de haber cedido solo dos servicios en todo el torneo, empezó a acariciar el set cuando se puso 4-1 tras hacerle el primer break a Alcaraz.
No obstante, consiguió Carlitos recuperar su servicio aprovechándose de los errores en las voleas del ruso y con el 4-4 tuvo una bola de break para encarrilar el set, pero la salvó Rublev.
La igualdad continuó hasta el tie-break. Alcaraz desperdició un 5-3 y con unas sensaciones de dominio absoluto terminó sucumbiendo ante una defensa a ultranza de un tenista ruso que celebró con rabia llevarse la primera manga.
La sorpresa del break
No se le vio muy preocupado a Alcaraz tras perder el primer set. Rublev se marchó al vestuario y mientras el español se puso a dar toques a la pelota. El segundo set comenzó con Alcaraz dominando, relativamente cómodo.
Los dos tenistas hicieron de su servicio su mejor arma, por lo que sin posibilidad de haber ninguna rotura todo hacía indicar que el segundo set también se decidiría en el tie-break. No obstante, casi sin esperarlo Alcaraz le rompió el servicio en el momento cumbre.
El tenista de El Palmar supo esperar su oportunidad y tras una doble falta de Rublev le dio la estocada para sumarse el segundo set y empatar así un partido que volvía a empezar.
Alcaraz celebra un juego ante Rublev.
Reuters
No sufrió en exceso el tenista ruso el varapalo de haber perdido la oportunidad de ganar la segunda manga con la que así encarrilar el partido y trató de imponer su juego en el tercer set. Le tocó sufrir a Alcaraz para mantener su su servicio, pero con un juego más agresivo fue ganando terreno.
Hasta que en el 3-3 llegó la primera rotura. Carlitos se llevó el juego de manera majestuosa: tras ir 30-0 abajo, con un passing y subir a la red empató el juego, mientras que en una gran defensa consiguió romper el servicio a Rublev y tras confirmar la ventaja, se puso por delante en el partido.
En el cuarto set el guion del partido no cambió y después de que ambos tenistas se disputaran varios juegos en blanco, Alcaraz rompió el tercer servicio de Rublev después de tener hasta cuatro bolas de break, consiguiéndolo en la última.
Confirmó la ventaja en su servicio y no arriesgó hasta alzarse con la victoria. Por tercer año seguido, Carlos Alcaraz jugará los cuartos de final de Wimbledon y lo hará ante Cameron Norrie.