El Gobierno sacará este año una oferta de empleo público (OEP) de hasta 27.000 plazas para la Administración General del Estado (AGE), un 15% menos que las ofertadas el año pasado. Una disminución de las plazas que no ha satisfecho a los sindicatos, que rechazan por insuficiente la última propuesta y que suman así un desencuentro más con el Ejecutivo en materia de función pública.
A falta de concretar el detalle final de la oferta, en la «cuarta y última reunión», en palabras del Ministerio de Transformación Digital y Función Pública, la lista de nuevas plazas este año será de hasta 27.000. Es una cifra más baja que la del año pasado, tanto en volumen, como en número de plazas de empleo neto puestas encima de la mesa por el equipo del ministro Óscar López.
El año pasado el Gobierno para la AGE ofertó 31.465 plazas para la AGE, de las cuales 10.625 plazas fueron para promoción interna y las 20.840 restantes de acceso libre. Para este ejercicio, las cifras ofrecidas por los distintos sindicatos bailan y el Ministerio ni confirma ni desmiente ninguna.
El sindicato CCOO, que ya no apoyó la OEP del año pasado por considerarla insuficiente, habla de unas 27.000 plazas, de las que 16.500 serían de nueva creación. Mientras que el sindicato Csif, el más contrario al Ejecutivo durante estos últimos años, habla de unas 20.000 plazas, de las que 4.500 serían de acceso libre y el resto para promoción interna.
UGT, por el momento, no se ha pronunciado ni ha publicitado cifras, si bien fuentes conocedoras apuntan a que tampoco secundarán la oferta pública. Todos estos números no incluyen a las Fuerzas Armadas y Cuerpos de Seguridad del Estado.
El Gobierno da por cerrada la negociación, que formalmente ha tenido cuatro encuentros y no ha sido hasta el último del que han trascendido cifras. Donde coinciden las centrales es en que los números planteados son insuficientes, especialmente en las plazas de nueva creación, es decir, mediante las que la Administración gana músculatura.
Según cifras ofrecidas por CCOO, en el último año se han jubilado o dado de baja unos 12.000 empleados públicos, por lo que lo presupuestado para oposiciones este 2025 se queda corto, a su entender. «Nunca antes se había superado la barrera de las 10.000 bajas«, explican desde la central. Ellos estimaban necesario para este año unas 26.500 plazas de acceso libre, algo que queda lejos de las 16.500 que les ha ofrecido el Gobierno.
Próximamente, a Consejo de Ministros
Entre las centrales existe la inquietud ante la jubilación masiva de empleados públicos que ya ha comenzado y que se intensificará en los próximos años. Y es que la media de edad en la Administración General del Estado, donde está el Sepe o la Tesorería General de la Seguridad Social, supera los 50 años. «No basta con crear empleo neto, éste tiene que ser en número suficiente para cubrir las pérdidas estructurales acumuladas en toda la AGE», han insistido desde Csif en un comunicado.
Ahora la principal incógnita es cuándo el Ministerio de Transformación Digital y Función Pública decidirá elevar a Consejo de Ministros esta OEP para empezar así el proceso para calendarizar oposiciones. Desde el Ministerio «agradecen las aportaciones de los sindicatos que han contribuido a mejorar la oferta de empleo público» y afirman que «se presentará próximamente al Consejo de Ministros«, sin mayor concreción.
Los sindicatos también han criticado la lentitud del Gobierno a la hora de convocar y cubrir las oposiciones aprobadas en años anteriores. Según datos de Csif, actualmente hay acumuladas alrededor de 28.400 plazas aprobadas en años anteriores pero no convocadas todavía o asignadas definitivamente, lo que equivaldría prácticamente a la OEP prevista por el Gobierno para este ejercicio 2025.
Una lentitud en los procesos públicos que amenaza con dejar caducar plazas pendientes y no favorece el ingreso de nuevos empleados a la Administración. «En los últimos 10 años se ha producido una pérdida neta de 20.640 empleos, según datos facilitados por el propio Ministerio de Función Pública», añaden desde Csif.