Pedro Acosta, campeón del mundo de Moto3 en 2021 y Moto2 en 2023, tenía grandes expectativas en MotoGP, pero tras una temporada de aprendizaje en el satélite Tech3, su primer año con la escuadra oficial de KTM está siendo más complicado de lo que esperaba.
La crisis económica de la compañía y la falta de resultados sumieron al piloto murciano en un mar de dudas y le acercaron a al equipo de su ídolo Valentino Rossi, VR46, ante la posibilidad de subirse a una de sus Ducati Desmosedici en 2026, pero el sueño -de momento- deberá esperar.
Acosta, que el pasado domingo logró acariciar el podio en Assen, finalizando cuarto, y marcha octavo clasificado en el Mundial con 98 puntos, lejos de los 307 del líder Marc Márquez, participó a su regreso a Murcia en un evento organizado por uno de sus patrocinadores, Huertas Motor Volkswagen, y habló de su situación.
El ‘tiburón’ valoró su actuación en el Gran Premio de Países Bajos, donde completó «un buen fin de semana con una de las mejores carreras del año» y aseguró que «hay que ver las cosas desde la perspectiva positiva y ver que nos estamos acercando al podio, que es lo que nos falta, pero estamos luchando, afrontando cada carrera al cien por cien y hemos dado pasos importantes en los últimos grandes premios».
Sobre su contrato con KTM recordó que tiene firmada también la próxima campaña y expresó su gratitud con la marca austríaca: «Ellos me dieron la oportunidad, hemos hecho mucho yo por ellos y ellos por mí y seguimos juntos hacia adelante», subrayó.
Sin vía de escape
Albert Valera, el manager de Pedro Acosta y Jorge Martín, concedió una entrevista a DAZN en Assen para analizar los dos casos, que discurren por cauces muy diferentes. Aprilia, que se cierra en banda y amenaza con llegar a los tribunales ‘Martinator’ se empeña en marcharse a final de año, aferrándose a una cláusula liberatoria por rendimiento. En cambio, Acosta no tiene forma de anticipar su salida de KTM.
«Pedro va a tener que cumplir su contrato con KTM, a menos que podamos apelar a la voluntad de KTM» afirmó Valera. “Hay un contrato que respetar, no tenemos ninguna cláusula. Es verdad que Pedro no está ahora mismo feliz, lo dice muchas veces, no es algo que os vaya a descubrir yo ahora. Se esperaba mucho más de este 2025. La armonía y la ilusión no fluyen como antes porque se ha llevado un golpe de realidad, pero tiene un año más», reconoció.
«Esperamos que las cosas mejoren. Sabemos que KTM está trabajando duro para que lleguen evoluciones en verano. Si no mejoran, tendremos que quedarnos un año más sufriendo o esperando que lleguen cosas nuevas» dijo Valera, que a estas alturas se siente culpable de haber guiado al piloto murciano a extender su acuerdo con los de Matighoffen.
“Pedro es un chico que ha ganado la Red Bull Rookies Cup, Moto3 y Moto2 y el sabía que tenía que dar estos años primeros a KTM por todo lo que han hecho por él en las categorías inferiores, pero el tercer año (2026) es verdad que lo dimos pensando en otra coyuntura, en otro escenario que no se ha dado y nos vemos ahora prisioneros de lo que firmamos. Yo soy el primer responsable, le dije a Pedro que podía confiar en este proyecto, que lo veía sólido y que tenía todo el sentido del mundo no estar cambiando cada año de equipo. Soy el responsable de animarlo a firmar un tercer año con KTM y me sabe muy mal ver a Pedro triste porque es un chaval espectacular, un ganador que ahora mismo no tiene las herramientas para luchar», lamentó el manager barcelonés.