La evolución en el mundo del automóvil no pasa por sacar única y exclusivamente modelos nuevos que satisfagan los deseos de los posibles compradores. Los cambios que en poco menos de diez años llegarán a nuestras vidas, lleva a muchas marcas a mejorar sus motorizaciones para cumplir las cada vez más exigentes normativas que llegan desde la Comunidad Europea.
Renault acaba de presentar a los medios de comunicación el nuevo propulsor “Full Hybrid E-Tech”. Una evolución que supone un paso adelante ajustar los consumos, las emisiones, y que permite disfrutar con una conducción eficiente.
Renault evoluciona el motor Full Hybrid E-Tech del Symbioz y Espace / Raúl Rodríguez
Una caja de cambios renovada
Uno de los cambios importantes llega en la caja de cambios. El motor eléctrico principal cuenta con dos marchas, mientras que el modelo de combustión cuenta con cuatro. Esto permite disponer de quince combinaciones posibles de funcionamiento entre los distintos motores.
Estamos hablando de un vehículo híbrido que no se enchufa, por lo que es el propio vehículo el que selecciona el modo de funcionamiento. Cuenta con cuatro de ellos. En el modo 100% eléctrico, solo funcionan los motores eléctricos para impulsar las ruedas. Desde la marca, aseguran que se puede circular en modo 100% eléctrico durante el 80% del recorrido.
En la prueba a la que hemos sometido tanto al Symbioz como al Espace, es cierto que en un entorno urbano los vehículos van en modo eléctrico durante mucho tiempo. No fue una prueba larga para asegurar circular en ese modo durante el 80%, pero pinta bien. Es muy fácil recargar la batería. Sobre todo, con las levas que van detrás del volante, y que cuenta con tres posiciones que van de más a menos regeneración, en función de las necesidades de conducción.
Otro de los modos es el “Hybrido dinámico”, en donde el motor térmico y el eléctrico trabajan juntos para que el vehículo ruede. En el modo “e-drive”, el motor eléctrico es el que se encarga de mover las ruedas, mientras que el motor térmico se encarga de recargar la batería. Por último, en el modo “térmico”, es el motor de gasolina el que impulsa las ruedas, contando con una doble función al recargar también la batería.

Renault evoluciona el motor Full Hybrid E-Tech del Symbioz y Espace / Raúl Rodríguez
Motorizaciones
En el Symbioz, el motor térmico de 1.6 litros pasa a 1.8 litros. Aumenta la potencia, pasando de los 94 CV a los 109 CV. Incorpora dos motores eléctricos. Uno de 50 CV, cuya función principal es la de impulsar las ruedas y cargar la batería mientras frena el vehículo y desacelera. El otro, HSG, para los cambios de marcha, con 20 CV. La batería también es nueva, de 1.4 kWh, que mejora con respecto a la versión anterior.
En el caso del Espace, el motor Full Hybrid E-Tech también se ha optimizado, ofreciendo 200 CV de potencia. Está compuesto por un bloque de gasolina de tres cilindros de 1.2 litros que rinde 130 CV de potencia.
También incorpora dos motores eléctricos. El principal de 70 CV, que es alimentado por una batería de 400 V, y es el que se utiliza para la conducción eléctrica. El motor secundario (HSG) se utiliza para arrancar el motor de combustión interna y cambiar de marcha.

Renault evoluciona el motor Full Hybrid E-Tech del Symbioz y Espace / Raúl Rodríguez
Eficiencia y suavidad
En carretera, tanto el Symbioz como el Espace respondieron a la perfección. Es fácil moverlo en modo eléctrico cuando estamos en ciclo urbano y respetamos los límites de velocidad, por supuesto. Es fácil regenerar la carga de la batería y conseguir que durante muchos kilómetros rodemos en modo totalmente eléctrico.
El salto al motor de combustión es suave, pudiendo combinar ambos mundos sin que notemos diferencias. Un buen paso adelante del modelo del rombo, que continúa dando pasos para conseguir ser lo más eficiente posible.