Clasificación agridulce del Inter Miami para los octavos de final del Mundial. Ganaba por 2-0 al Palmeiras y lo tenía todo de cara para terminar líder del Grupo A, lo que significaba evitar al PSG, uno de los cocos del torneo, en el cruce de octavos de final. Sin embargo, el conjunto paulista, que cuenta con una de las mejores plantillas de Sudamérica, sacó fuerzas de flaqueza para arrancar un empate épico (2-2) en un final de locos, con dos tantos en diez minutos.
La machada de que un equipo de la MLS pasara el corte de la fase de grupos quedó enturbiada por la reacción de un Palmeiras con mucho corazón. Y ahora Leo Messi, que este martes celebra sus 38 años, tendrá que reencontrarse con Luis Enrique y con su exequipo, que viene de proclamarse campeón de la Champions.
El Verdao, por su parte, tendrá un clásico brasileño ante el Botafogo, en un partido sin favoritos en los octavos. Mientras, el Oporto, una de las grandes decepciones del torneo, se va a casa sin haber ganado ni un solo partido. En la última jornada falló ante el Al-Ahly, con quien empató 4-4 en un encuentro con muchísimas alternativas.
Inter Miami pegó primero
El empate les iba bien a los dos. No lo pareció. En la etapa de tanteo y estudio inicial, ya dio para sentir que no habría concesiones por parte de nadie. Gustavo Gómez avisó con un cabezazo (min 3) y Leo Messi casi abre la caja de herramientas, después de acomodarse bien un balón que no logró rematar (min. 10).
El Inter Miami dio el golpe en una rápida transición en la que se aprovechó de que el Palmeiras estaba absolutamente expuesto y desorganizado atrás, lo que es una situación táctica inhabitual. Luis Suárez, casi con la barriga, habilitó a Tadeo Allende, que arrancó desde el propio terreno de juego sin oposición, porque el central Murilo se rompió en el repliegue. Y el ex del Celta, en un gran esprint, se plantó ante Weverton a quien batió con maestría (min. 15). Un golazo, en el que quedó claro que el Uruguayo, en dosis homeopáticas, es mucho, en este epílogo de su brillantísima carrera.
Las individualidades marcaban la diferencia. Y el tanto aseguraba la primera posición para los de rosa. Mientras, el Palmeiras, nervioso, le tocaba arriesgar para no tener un susto con una hipotética reacción del Oporto con el Al-Ahly.
Los de Mascherano se defendían con oficio y orden ante las ráfagas de los paulistas, nerviosos, precipitados, atacando muy alocadamente y sin ritmo de juego. Y cuando tenían la pelota, dormían el partido con largas posesiones, gracias al criterio de un doble pivote de tocador, formado por Sergio Busquets, que jugaba fácil y sin oposición, y el argentino Federico Redondo. En una de ellas estuvieron dos minutos y 50 segundos bailando a los palmeirenses.
Luis Suárez dejó su marca
El segundo tiempo fue un ejercicio de madurez de un Inter Miami que impuso durante muchos minutos sus galones ante un Palmeiras, entonces, perdido, empequeñecido, que estuvo a un paso de quedar eliminado.
Los de rosa se defendían con mucha garra con un bloque bajo muy efectivo, siguieron jugando de forma criteriosa con el balón en los pies y abrieron una gran ventaja en una gran acción individual de Luis Suárez, que se fabricó solo un golazo.El ex del Barça superó a dos adversario, se aprovechó de un rebote y remató con la zurda. Agotado, tuvo que pedir el cambio poco después.
Los brasileños, que estaban groguis, acumularon efectivos ofensivos. Con 2-0, Vitor Roque, que perdió la titularidad tra dos partidos aciagos, entró en escena. Y llegó la reacción palmeirense, que no fue precisamente gracias a Tigrinho, sino a la aportación del mediapunta Paulinho, que también salió del banquillo. El ex del Atlético Mineiro, que es uno de los fichajes estrellas del Verdao para este curso, hizo el 2-1 y fue clave en el 2-2 que hizo Mauricio.
Los brasileños terminaron mucho más enteros que un Inter a quien se le hizo muy largo el último cuarto de hora.
Ficha técnica: Inter Miami – Palmeiras (2-2)
Inter Miami: Ustari; Chelo, Avilés, Falcón, Allen; Busquets, Redondo (Rodríguez, 77′), Allende (Picault, 77′), Segovia (Jordi Alba, 66′); Leo Messi y Luis Suárez (Cremaschi, 73′)
Palmeiras: Weverton; Marcos Rocha (Allan, 67′), Gustavo Gómez, Murilo, Piquerez; Lucas Evangelista (Vitor Roque, 67′), Richard Ríos, Rapahel Veiga (Mauricio, 46′); Estevao, Facundo Torres (Paulinho, 54′) y Flaco López.
Árbitro: Szymon Marciniak (Polonia). Amonestó a / Leo Messi (45+1)
Goles: 1-0 Allende min 16; 2-0 Luis Suárez min 65; 2-1 Paulinho min. 80); 2-2 Mauricio min 87.
Incidencias: Hard Rock Stadium, en Miami (EE.UU.).