El Real Oviedo ha conseguido un histórico ascenso a Primera División. Tras 24 años vagando en Tercera y Segunda División, el equipo consiguió remontar al Mirandés, que se adelantó en el minuto 16 con un gol de Panichelli. El equipo terminó imponiéndose finalmente con un resultado 3-1.
La victoria ha tenido sabor ribereño. Carcaixent también se sumó ayer a la celebración del Real Oviedo, ya que el guardameta Aarón Escandell, que fue pieza clave durante el encuentro, es vecino de la localidad.
Escandell tuvo un papel esencial durante el partido, ya que antes del descanso consiguió parar un nuevo balón de Panichelli, que intentaba adelantar otra vez al Mirandés. Santi Cazorla marcó de penalti consiguiendo que el equipo llegara al descanso con un empate a 1.
Durante la segunda mitad, el Mirandés no encontró la oportunidad de atacar la meta de Aarón Escandell. Los goles de Ilyas Chaira y Francisco Portillo fueron claves para dar la victoria al Oviedo.
El guardameta ribereño se incorporó al Real Oviedo en julio de 2024, es decir, hace poco menos de un año. Escandell, que estará hasta junio de 2026, llegó al conjunto azul procedente de la UD Las Palmas, equipo en el que militó la temporada anterior.
El guardameta iniciaba su andadura en las categorías inferiores del Valencia para llegar en edad juvenil al Málaga, equipo del que saldría en 2017 rumbo a Granada. En Primera División ha disputado un total de 14 partidos, en cuatro temporadas, defendiendo las camisetas de Granada y Las Palmas. Ahora regresa a la máxima categoría del fútbol español para seguir protegiendo la portería del Real Oviedo.
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