El calor y las temperaturas extremas van a estar presentes a lo largo de esta semana en prácticamente todo el territorio español, tal como anuncia la Agencia Estatal de Meteorología.
Por ello, si sueles aparcar el coche en la calle durante las horas más cálidas del día o conduces habitualmente en ellas, debes recordar no solo que es más probable que sufras los efectos de la fatiga al ponerte al volante, sino que las altas temperaturas podrían llegar a deteriorar la carrocería y el interior del habitáculo de tu coche.
El sol puede provocar fatiga al conducir / Archivo
Protege tu coche
El primer remedio para proteger el coche de los rayos del sol es muy obvio: aparcar en la sombra. No obstante, las plazas de aparcamiento con sombra son las más buscadas por los conductores y las primeras en ocuparse, sobre todo si van a estacionar el coche durante periodos prolongados. Por este motivo, lo mejor es que intentes adelantarte al movimiento que realizará el sol a lo largo de las horas para que, al final, tu coche acabe estacionado bajo la sombra.
Otro truco útil para reducir la temperatura de la carrocería y hacer frente al calor en el habitáculo es lavar el coche con agua fría de forma periódica. Eso sí, no lo hagas durante las horas más calurosas porque el agua se evaporará más rápido y no conseguirás el efecto deseado.

Los parasoles son uno de los mejores accesorios para el coche / Archivo
Accesorios para enfriar
A la hora de conducir, existen un sinfín de accesorios que puedes equipar en el vehículo para hacer más llevadera la ola de calor, como los ventiladores portátiles.
Asimismo, para reducir la temperatura interior puedes recurrir a accesorios clásicos como los parasoles para el parabrisas delantero, los parasoles para las ventanillas traseras o incluso las fundas o parasoles específicos para el volante del coche.
Por último, para evitar que las sillitas infantiles se calienten y lleguen a quemar, puedes optar por una funda antitérmica, o, en su defecto, cubrirlos con una manta o algo parecido.

Lavar tu coche con agua fría puede servir para enfriarlo / Freepik
¿Sale caro usar el aire acondicionado?
El aire acondicionado es actualmente un elemento casi imprescindible en el coche. Sin embargo, suele salir caro si le pedimos que trabaje mucho, pues emplea un compresor acoplado a la correa del motor que consume energía.
Ten en cuenta que cuanto más caliente sea el aire del exterior y cuanto más baja sea la temperatura que busquemos en el interior, mayor será el trabajo del sistema y, por lo tanto, el consumo de combustible.
De hecho, se estima que en la época más calurosa del año el consumo puede elevarse entre un 5% y un 20% por el uso del aire acondicionado. Aproximadamente entre 0,2 litros y 1 litro de combustible a los 100 kilómetros, por lo que muchos conductores renuncian al aire acondicionado y optan por bajar las ventanillas del coche para refrescarse.