En un día de agonía general en el US Open, Sam Burns se ha convertido en el hombre que ha logrado descifrar el código de Oakmont. Porque el campo ha sido respondón en el segundo día, vetando su par 70 a prácticamente todos los hombres que lo han pisado.
De hecho, tras dos jornadas de competición, apenas tres valientes resisten en números negativos. Burns es líder del US Open con -3, por delante de los -2 de J.J. Spaun y del -1 que acumula Viktor Hovland. Porque el día ha sido de sufrimiento, de bogeys, de cortes y de jugadores que han perdido comba pero que, casi con la misma facilidad con la que han caído este viernes, pueden auparse el sábado si se mantiene la tendencia global.
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Es ahí donde emerge Jon Rahm. En un día difícil, en el que las posiciones en green no han sido buenas, en el que los putts no han acompañado y en el que un +5 en la jornada es un buen reflejo del castigo sufrido en el campo, el jugador de Barrika se mantiene en el top25. Su +4 global, aunque haya cedido comba, aunque tenga a siete golpes al líder, es un resultado perfectamente recuperable si este sábado logra ajustar su juego para ser él quien escape de la trampa del US Open 2025.
Porque Rahm sigue vivo y porque hay otros muchos favoritos que no pueden decir lo mismo. Ludvig Aberg, Gary Woodland, Cameron Smith, Dustin Johnson, Sepp Straka, Justin Thomas, Justin Rose o Shane Lowry son algunos de los muchos hombres, todos ellos con nombres relevantes, que han caído más allá del +7 salvador que ha entregado el pase al fin de semana. Aunque, para relevante, el del vigente campeón Bryson DeChambeau, noqueado con un +7 en el día para +10 global que le deja fuera de combate.
Resisten arriba otros hombres llamados a priori a ser candidatos, como un gran Hovland (-1), Adam Scott (par), Brooks Koepka (+2), Jason Day (+3) o, como el +4 de Rahm, Collin Morikawa y Scottie Scheffler. Este viernes no era el día para brillar, sino para sobrevivir, y únicamente los supervivientes tendrán la opción de intentar lucirse durante el fin de semana.
Clasificación tras la segunda vuelta (par 70)
1. Sam Burns (Estados Unidos) 137 (72-65)
2. J.J. Spaun (Estados Unidos) 138 (66-72)
3. Viktor Hovland (Noruega) 139 (71-68)
4. Adam Scott (Australia) 140 (70-70)
4. Ben Griffin (Estados Unidos) 140 (69-71)
6. Victor Perez (Francia) 141 (71-70)
6. Thriston Lawrence (Sudáfrica) +1 (tras el 17)
8. Russell Henley (Estados Unidos) 142 (70-72)
8. Brooks Koepka (Estados Unidos) 142 (68-74)
8. Si Woo Kim (Corea del Sur) 142 (68-74
8. Thomas Detry (Bélgica) +2 (tras el 17)
…
23. Jon Rahm (España) 144 (69-75)
Hasta entonces, la luz que se cierne sobre Oakmont la ha puesto Sam Burns. El estadounidense ha brillado con un sideral -5 en el día, merced a seis birdies y un bogey. Cómodo en el juego largo, ha metido un buen putt en el par cuatro del 11, se ha dejado dado el birdie del par tres del 13, ha putteado incluso para eagle en el par cuatro del 17 y ha brillado desde la calle en el par cuatro del 18. Con -4 tras nueve hoyos, ha cometido un bogey en el 1.
En definitiva, solidez de principio a fin en una jornada en la que esta valía oro. J.J. Spaun es segundo con -2, pero tras un día sufrido en el que ha combinado la brillantez de sus cuatro birdies con la dificultad de seis bogeys. Algo similar le ha sucedido a Viktor Hovland, con un eagle, cinco birdies, tres bogeys y un doble bogey que se han traducido en dos golpes de ganancia para, con -1, completar la terna que se encuentra bajo par.
Con Adam Scott (tres birdies y tres bogeys) y Ben Griffin (dos birdies y tres bogeys) en el par, el top10 se cierra con un +2 que comparten varios hombres. Entre ellos, Brooks Koepka (cuatro birdies y ocho bogeys), quien se agarra a él a pesar de un día también muy sufrido. Por ello, no hay que minusvalorar a otros hombres que no se encuentran lejos de esos puestos.
Del sufrimiento de Rahm y Scheffler al corte salvado por McIlroy
Se podría citar a Tyrrell Hatton y Jason Day con +3 o la terna Rahm-Morikawa-Scheffler con su +4. Jon ha sufrido mucho con el juego largo, no se ha dejado buenas situaciones para puttear para birdie y, a pesar de sus cuatro bogeys, un doble bogey y un solo birdie, se mantiene metido en la pelea entre los hombres que acechan el top10.
Algo similar les sucede a Morikawa y a Scheffler. El primero ha firmado un bogey y un doble bogey casi de inicio y, tras un birdie, ha visto su vuelta tambalearse tras dos nuevos errores. Sin embargo, ha logrado ser sólido a partir del hoyo 10, ha clavado los pares y se ha dado mucha vida de cara al sábado. Vida que también tiene el número 1 del mundo, en su caso con cuatro birdies y cinco bogeys en un día de altibajos que, al fin y al cabo, ha terminado salvando.
Salvados, por la campana, apuntaban a terminar Rory McIlroy (+6), Hideki Matsuyama (+7) o Patrick Reed (+7), estos dos últimos con el resultado que parecía delimitar el pase al fin de semana. Rory, especialmente, ha sufrido de lo lindo, con dos doble bogeys tras tres hoyos que amenazaban por tirar por la borda su US Open 2025. Pero, desde entonces, McIlroy ha encontrado calles con fluidez, ha llegado sin agobios a los greenes y ha aprovechado tres opciones, frente a un bogey más, para conseguir el pasaporte para la jornada del sábado.
En ella, por muchas diferencias que haya ahora, todo puede cambiar. Será el momento para que los candidatos a la victoria den un paso al frente para tratar de cambiar la parte delantera de una tabla que lidera Burns. Con Spaun y Hovland como los tres únicos hombres que le han ganado la partida a Oakmont tras dos jornadas, tanto el campo como sus perseguidores tienen mucho que decir todavía. Jon Rahm, entre ellos, es uno de los candidatos a revertir su tendencia de este viernes y a alzar la voz.