El padre de Carmen falleció en 2010 y les dejó una tienda de comestibles, una vivienda y tres terrenos.
Un día llegó un inspector de Hacienda y les hizo firmar un papel. Tras esto, les llegó una deuda de 210.000 euros.
Una situación que dejó a todos sin palabras y a su madre devastada.
En la actualidad deben 600.000 euros y no tienen forma de afrontarlo, ni siquiera vendiendo todo.
No sabe qué va a pasar con su casa ni con su hijo. Señala que su madre va a morir por la herencia de su padre.
¿Tiene esperanza de que se resuelva esta situación?
