La ciencia española acaba de incorporar a su arsenal técnico un nuevo y potente laboratorio dedicado específicamente a los imanes de nueva generación, una tecnología puntera que podrá contribuir desde la lucha contra el cambio climático hasta la búsqueda de tratamientos contra enfermedades hasta ahora incurables. Esta nueva infraestructura pionera, presentada esta mañana por la ministra de Ciencia, Innovación y Universidades, Diana Morant, ha sido bautizada como Laboratorio de Imanes de Alto Campo SMART-Lab y se sitúa en el Centro de Investigaciones Energéticas, Medioambientales y Tecnológicas (CIEMAT) de Madrid. «Este este laboratorio único en España será clave para ganar soberanía estratégica y tecnológica ante un nuevo escenario climático y geopolítico», ha destacado Morant durante la presentación de este martes.
El nuevo SMART-Lab, que arranca con un presupuesto total de 8,5 millones de euros, nace de la colaboración entre el Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades (MICIU), a través del CIEMAT y el Centro para el Desarrollo Tecnológico y la Innovación (CDTI), y el prestigioso Laboratorio Europeo de Física de Partículas (CERN). Las infraestructuras ocupan cerca de 1.000 metros cuadrados distribuidos en tres plantas, está equipado con hornos especializados, bobinadoras de alta precisión y dispositivos de última generación que, en su conjunto, permitirán crear tecnologías que hoy solo pueden imaginarse en unos pocos países del mundo. El objetivo final de este proyecto es, de hecho, fabricar imanes superconductores de hasta 2,5 metros de largo y 10 toneladas de peso.
La infraestructura tiene capacidad para fabricar imanes superconductores de hasta 2,5 metros de largo y 10 toneladas de peso
Más allá de su dimensión científica, este nuevo laboratorio también pretende ser un catalizador para la industria nacional. En estos momentos se estima que el mercado de imanes de última generación solo en el ámbito de grandes instalaciones científicas podría superar los 5.000 millones de euros entre 2028 y 2045. «Queremos que las empresas españolas estén preparadas para competir en ese escenario», han apuntado Morant durante la presentación de este martes, en la que también ha destacado que «el conocimiento que brote de este laboratorio se trasladará a las empresas del sector de imanes superconductores para contribuir a crear, por ejemplo, la energía limpia y barata del futuro, la energía de fusión».
«El conocimiento que brote de este laboratorio servirá para crear, por ejemplo, la energía limpia y barata del futuro, la energía de fusión»
El laboratorio se ha puesto ya en marcha y, por ahora, en sus instalaciones ya trabajan una quincena de profesionales entre ingenieros y técnicos. Entre sus primeros trabajos destaca la fabricación de imanes correctores MCBXF de alta luminosidad del CERN y el desarrollo de prototipos basados en la innovadora configuración Common Coil para el futuro gran colisionador europeo. En este sentido, Morant también ha avanzado que desde este nuevo laboratorio, «España contribuirá a crear la próxima familia de colisionadores de Física de Partículas, un paso fundamental para diseñar y testar los nuevos materiales de instalaciones e instrumentos científicos punteros, que nos ayudarán a proteger el planeta y a mejorar la vida de la gente».