La campaña de la renta encara su recta final y todavía hay muchas dudas sobre muchos de sus aspectos que muchas personas, millones de hecho, desconocen y que luego pueden derivar en multas de la Agencia Tributaria.
Las transferencias entre familiares, a partir de cierta cantidad, se tienen que declarar ya que, en función de quien sea el donante o el que recibe el dinero hay que pagar dinero en impuestos. Igual que sucede en la compra de una casa, los vendedores tienen que pagar un tributo y los compradores otro.
En este caso, el que da dinero, es decir, el donante, tiene que pagar IRPF, mientras que la persona que lo recibe, el donatario, debe pagar el Impuesto de Sucesiones y Donaciones. Sin embargo hay un ‘pero’ y es que el donatario solo tiene que pagar impuesto si hay una ganancia patrimonial.
¿Pero cuál es la cantidad? 3.000 euros. A partir de ahí, Hacienda puede investigar cualquier donación y transferencia, por lo que hay que incluirla en la Declaración de la Renta.
Desde EVO Banco recalcan que, a partir de 100.000 euros, hay que presentar en Hacienda el modelo S1 y que las multas pueden oscilar entre los 600 euros y el 50% de la cantidad transferida, lo que puede ser un buen ‘palo’. Pero en el caso de que no se pueda justificar el origen del dinero, la multa puede alcanzar los 150.000 euros.