David y Miguel Ángel murieron arrollados por una narcolancha el 9 de febrero de 2024. Los cuatro ocupantes de aquella goma, tras embestir a los guardias civiles en el puerto de Barbate, huyeron rápido a mar abierto. El destino, Sanlúcar de Barrameda, la puerta de entrada al Guadalquivir. Por allí subieron hasta Lebrija, donde continuaron con una evasión que los llevó luego por Sevilla, Algeciras o Fuengirola antes de regresar a Marruecos. Hasta el pasado 4 de mayo, cuando se detuvo al fin al cuarto y último de estos tripulantes fugados.
Karim El Baqqali, Yassine El Morabet, Mohamed Laachiri y Abdennour El Hichou. Estos son los arrestados, los cuatro individuos que viajaban a bordo de la semirrígida que acabó con la vida de los agentes. Todos ellos acabaron por entregarse a las autoridades españolas entre siete y 15 meses después de la tragedia. El primero, el supuesto piloto de la embarcación, Karim, que se personó ante la Guardia Civil en Barbate el 20 de septiembre.
El Hichou, por su parte, hizo lo propio el 4 de mayo. A las 01:18 de la madrugada, una llamada de su abogado a la Benemérita sirvió de aviso: se entregaría en La Barca de Vejer (Cádiz) en aproximadamente dos horas. Y así fue: los efectivos lo detuvieron en esta localidad gaditana a las 03:50, tal como aparece en el informe de la UCO entregado al día siguiente en el Juzgado de Barbate, al que ha tenido acceso en exclusiva El Correo de Andalucía. Fin a una huida de más de un año.
Rumbo al río Guadalquivir
La fuga comenzó la misma noche de los hechos. Después de arrollar la zodiac en la que iban seis agentes, sobre las 20:25 del 9 de febrero de 2024, los tripulantes de la narcolancha decidieron escapar de lugar. El motivo, que «el resto de gomas que se habían refugiado del temporal abandonaron el puerto de Barbate«, según el testimonio que dio El Hichou en la Comandancia de la Guardia Civil tras su arresto.
En esa primera huida fijaron como objetivo Sanlúcar de Barrameda, en la desembocadura del Guadalquivir. A este punto llegaron sobre las 06:00 del día siguiente, según consta en el acta de declaración de Abdennour El Hichou. «Esa misma jornada subieron por el río, y por la noche, a la altura de Lebrija, Yassine, Mohamed y él se bajaron de la embarcación, quedándose Karim a bordo». Una versión que coincide con las que dieron El Morabet y Laachiri ante el Instituto Armado, tal como publicó El País.
Fotografía de la detención del Abdennour El Hichou. / Guardia Civil
Pero ¿por qué se bajaron tres de los ocupantes cuando alcanzan Lebrija aquel 10 de febrero por la noche? Según el último detenido, porque habían pasado «mucho tiempo embarcados» y estaba previsto «que entraran otros tres en la semirrígida». «A Karim no lo relevaron porque llevaba menos días«, precisa El Hichou, de 39 años, en un interrogatorio que se prolongó durante casi dos horas.
Sevilla, Algeciras y Fuengirola
Una vez en el término de este municipio sevillano, fue a buscarlos a pie una persona que en teoría no conocían. Este compinche los recogió en el punto en que se habían bajado y los llevó hasta su casa, donde pasaron la noche siguiente a la tragedia. «A esta vivienda fueron andando«, según el testimonio que dio el arrestado en la Comandancia. «Tardaron aproximadamente dos horas en llegar».
A la jornada siguiente de bajarse de la narcolancha, el 11 de febrero, «Yassine El Morabet se fue a Sevilla, Mohamed Laachiri a Algeciras (Cádiz) y Abdennour El Hichou marchó a Fuengirola (Málaga)», apuntan los agentes que le toman declaración. Este último pasó, según su versión, «dos días en casa de unos amigos» que residen en esta ciudad de la Costa del Sol.
Cuando El Hichou llegó a esta vivienda, «aún no sabía qué había pasado», recoge al acta elaborada por la UCO. «Un día después de enterarse por la televisión de lo ocurrido, se va de Fuengirola y se desplaza a Ceuta a ver a su familia, donde se mantuvo un mes y medio». Pasado este tiempo, «se fue con su madre a un pueblo al lado de Tánger«, localidad en la que permaneció hasta la fecha de su entrega, el 4 de mayo de 2025.
Allí en Marruecos, país de origen de los cuatro arrestados, buscaron refugio supuestamente todos ellos. Meses después de la tragedia, acabaron por volver de forma escalonada a España para rendir cuentas ante las autoridades. Hace poco más de una semana lo hizo el último, Abdennour El Hichou. Como el resto, también se encuentra en prisión provisional como presunto autor de dos delitos de asesinato, cuatro en grado de tentativa, seis de atentado, uno de contrabando y otro de pertenencia a organización criminal.