El homenaje que se ha llevado a cabo este domingo en Austria con motivo de la conmemoración de los 80 años de la liberación del campo de concentración nazi de Mauthausen ha dejado una imagen insólita e histórica de la reina Letizia.
Acompañada por el rey Felipe VI, los reyes de España han asistido al campo de exterminio junto a delegaciones de 30 países y multitud de autoridades con el fin de condenar el fascismo y recordar a aquellos que murieron bajo el horror del régimen nazi. Entre ellos, 4.700 españoles de los 7.000 que fueron deportados durante la Segunda Guerra Mundial.
En el transcurso del acto de homenaje y recuerdo, la reina Letizia ha dejado una imagen llamativa con el pañuelo que llevaba en la mano. Una tela azul en la que se dibujaba una “S” de “Spainer” (español) dentro de un triángulo azul que representaba a aquellos “españoles rojos” o “Rotspanier”, como los denominaban los nazis, destinados a los campos de concentración. Este símbolo ha acompañado a la reina durante todo el acto hasta que, finalmente, lo ha depositado con la corona de flores en la ofrenda.
A los que me preguntáis por la S que lleva Doña Letizia, es la reproducción del emblema con el que los nazis identificaban a los españoles presos en Mauthausen (Spanier). Mas simbólico, imposible. pic.twitter.com/rpXqewJIrV
— Diana Rubio (@driecel) May 11, 2025
Homenaje para la memoria y la conciencia
El homenaje ha estado protagonizado por el recuerdo a las víctimas del nazismo. Los Reyes, durante el recorrido, han pidido visitar los barracones, las duchas, el crematorio y el “muro de las lamentaciones”, donde una placa colocada en 1978 recuerda a los españoles caídos. Los gestos de respeto, el silencio solemne y los saludos a los familiares de las víctimas han marcado una jornada en la que el dolor se ha transformado en memoria activa.
Sin embargo, la jornada no ha estado exenta de momentos intensos. Durante la ofrenda española, se han podido escuchar gritos de “¡Viva la República!” y “España mañana será republicana”, a los que los Reyes han respondido con serenidad y respeto. A pesar de ello, la presencia de Felipe VI y Letizia ha sido valorada positivamente por las asociaciones memorialistas, aunque también ha despertado sentimientos encontrados. Para Juan Manuel Calvo Gascón, presidente de Amical de Mauthausen, la participación del Rey ha sido “positiva”, pero ha deseado que en el futuro se reconozca explícitamente la complicidad del franquismo con el nazismo.
«Esperamos también que el Monarca, como jefe del Estado, haga un reconocimiento también explícito de las víctimas españolas y de la implicación y la connivencia que hubo de la España franquista con la Alemania de Hitler y con la Francia de Petén», ha añadido Calvo.
El Gobierno se une al recuerdo
También el Gobierno ha expresado su reconocimiento a los «hombres y mujeres que lucharon por la libertad y fueron asesinados aquí por ello, así como otros muchos miles que siguen en cunetas, fosas comunes en cementerios, o desaparecidos». Así, el ministro de Derechos Sociales, Pablo Bustinduy, ha aprovechado para pedir perdón «en nombre del Gobierno de España» por haber tardado tanto «en reconocer la lucha de los héroes y heroínas antifascistas». El ministro ha pronunciado un discurso en el que ha honrado a las personas antifascistas de España que, tras defender la República española, fueron víctimas de los campos nazis.
Bustinduy también ha reivindicado la «obligación de recordar para siempre a las millones de personas que los nazis asesinaron, incluyendo judíos, antifascistas de toda Europa y personas gitanas». En esta línea, ha incidido en la necesidad de combatir los «discursos reaccionarios, neofascistas, ultranacionalistas» que, según ha advertido, asaltan actualmente a cada vez más países. «Debemos repensar acciones políticas y discursos para evitar que nuestras democracias queden de nuevo arrasadas por el odio y la incertidumbre. Este es el mayor homenaje que podemos rendir a quienes honramos hoy aquí», ha manifestado.