El Juzgado de lo Contencioso Administrativo 12 de Barcelona mantiene paralizada cautelarme la eutanasia de Noelia, la mujer de 24 años con paraplejia, pese a que hace unos meses rechazó la demanda de su padre para anular esta muerte asistida. En una respuesta a la Generalitat, el juzgado señala que «las medidas cautelares estarán en vigor hasta que recaiga sentencia firme que ponga fin al procedimiento». El padre de Noelia, representado por la Fundación Española de Abogados Cristianos, ha recurrido ante el Tribunal Superior de Justícia de Catalunya (TSJC).
A mediados de marzo, el juzgado autorizó la eutanasia de Noelia después de varios meses de procedimiento judicial, que todavía no ha acabado. La muerte asistida estaba programada para julio pasado y el padre presentó una demanda para anularla en el juzgado, quien paró la eutanasia de forma cautelar hasta tomar una decisión. La vista oral por esta causa se celebró a inicios de marzo y en ella la mujer reiteró su voluntad de morir dignamente.
Por eso, la jueza rechazó el recurso que presentó el padre de la joven y dio luz verde a la eutanasia. Sin embargo, el progenitor ha presentado recurso ante el TSJC y por eso el procedimiento judicial sigue abierto. La Generalitat instó al juzgado a saber si seguían en vigor las medidas cautelares de paralización para informar a los miembros del pleno de la Comisión de Garantía y Evaluación de Catalunya, que son los que autorizan la eutanasia.
En una diligencia, el juzgado señala que las medidas siguen en vigor, por lo que todavía no se puede administrar la eutanasia a Noelia hasta que el TSJC resuelva el recurso. Tras conocerse esta nueva decisión judicial la presidenta de Abogados Cristianos, Polonia Castellanos, asegura que «es escalofriante la insistencia de la administración pública por acabar con la vida de una chica con enfermedad mental, en contra de la voluntad de la familia. La Generalitat debería utilizar el dinero público para garantizar un tratamiento eficaz a Noelia, en vez de abocarla a morir».