El Ibex 35 ha cerrado su segunda semana consecutiva al alza. El avance, del 3,38%, ha sido registrado en un contexto de menor tensión comercial gracias al acercamiento de Estados Unidos y China. Y, con él, el selectivo de la Bolsa española ha superado los 13.300 puntos, conquistando, además, niveles no vistos desde antes del anuncio de aranceles recíprocos por parte de Donald Trump.
Sólo este viernes, el Ibex 35 ha repuntado un 1,33%, hasta los 13.355,3 puntos. En la sesión han destacado el avance registrado por Mapfre (+8,05%) tras presentar resultados y las subidas de Ferrovial (+3,28%) y Sacyr (+2,55%).
Por el contrario, la mayor caída del índice ha sido la de Indra. La compañía, que ha confirmado que está estudiando su fusión con Escribano, ha retrocedido un 2,32%. También han sobresalido las pérdidas de Cellnex (-1,17%) y de Fluidra (-0,2%).
Con el repunte de la sesión de este viernes, el Ibex 35 ha puesto un broche de oro a una semana en la que, a pesar de ser más corta de lo habitual -el lunes fue festivo en la Bolsa- ha repuntado un 3,38%. Se trata de la segunda semana consecutiva de ascensos tras haber avanzado la anterior un 5,14%.
Gracias a ella, el Ibex 35 ha superado los niveles previos a los registrados el 2 de abril, cuando Trump anunció los aranceles recíprocos en el conocido como ‘Día de la Liberación’ de Estados Unidos. Eso sí, el índice nacional ha subido más al mediodía, cuando ha marcado máximos diarios en los 13.375 puntos.
Así cierra el Ibex 35
La apertura con dudas en Wall Street, y las posteriores caídas registradas en el parqué neoyorquino, han restado fuste al avance del Ibex 35. En cualquier caso, la subida del selectivo ha sido una de las más abultadas en una sesión de mayoría de ganancias en los parqués europeos.
Las subidas de los índices del Viejo Continente han ido del 0,7% hasta el 1,3%, con la excepción del FTSE 100 de Londres, que ha restado un 0,06%. A pesar de ello, la semana ha sido positiva para las bolsas europeas.
Un Trump menos agresivo
Lo mismo ocurría con los principales índices de la Bolsa de Nueva York, que se aproximaban a cerrar la semana al alza pese al tropiezo de este viernes. En el cómputo semanal, el Dow Jones sumaba un 1,8%; el S&P 500, un 3,7%, y el Nasdaq Composite, un 5,6%.
La tranquilidad, al menos de forma relativa, ha vuelto a los mercados después de dos semanas de movimientos verticales, tanto a la baja como al alza. La razón es la postura menos agresiva de la Administración estadounidense.
Por un lado, el republicano se ha mostrado dispuesto a «ser muy bueno» con China y buscar la manera de «trabajar juntos», lo que permitiría que los aranceles a los productos del gigante asiático bajen «sustancialmente», aunque sin llegar a cero.
En declaraciones a la prensa, el inquilino de la Casa Blanca admitió que el nivel de aranceles del 145% es muy elevado, como consecuencia de varios elementos, incluyendo la lucha contra el fentanilo, por lo que confía en que finalmente «no será tan alto».
Aunque China ha instado a Estados Unidos a retirar los aranceles, parece que sí se puede producir un acercamiento comercial entre ambos países. Según ha publicado Bloomberg, el Gobierno del gigante asiático estaría considerando suspender el arancel del 125% sobre algunas importaciones de productos estadounidenses.
De este modo, Pekín estaría estudiando eliminar los gravámenes adicionales para equipos médicos y algunos productos químicos industriales, así como para el arrendamiento de aviones por parte de las aerolíneas chinas.
Las posibles exenciones que China estaría considerando son similares a las aplicadas por Washington, que excluyó los productos electrónicos de los aranceles del 145% con los que grava, desde principios de este mes, las importaciones chinas.
Además, tras redoblar la presión sobre el presidente de la Reserva Federal (Fed), Jerome Powell, Trump descartó su despido. No tiene «ninguna intención de cesar» al banquero central, subrayó hace unos días.
La sangría del dólar se frena
El tono más conciliador del mandatario ha servido para que las bolsas se anoten ganancias, así como para que el dólar estadounidense frene sus caídas. El interés de la deuda estadounidense también se ha relajado.
El índice dólar, que mide la evolución de la divisa estadounidense frente a las principales monedas del mundo, ha repuntado esta semana un 0,3%, tras caer durante cuatro semanas consecutivas. Gracias a este avance se vuelve a situar cerca de la cota de los 100 puntos.
Como consecuencia, y tras haber alcanzado los 1,15 dólares a principios de semana –cuando Trump criticaba a Powell y el mercado ponía en duda la independencia de la Fed-, el euro ha perdido un 0,3% de su valor frente al billete verde.
Es, a la inversa, su primer descenso tras cuatro subidas semanales consecutivas. Debido a este descenso, el cambio se sitúa en torno a los 1,136 dólares.
Al mismo tiempo, la rentabilidad de la deuda estadounidense se ha reducido en las últimas sesiones, tras haber aumentado en la primera parte de la semana. De esta forma, el interés de los bonos a 10 años se situaba por debajo del 4,3%.
Como ocurría con las bolsas, el mayor apetito de los inversores por los activos de riesgo también beneficiaba a las criptodivisas. El repunte semanal de bitcoin era del 12% y con él el activo digital superaba los 95.000 dólares. El avance acumulado por el ethereum era similar, pero en su caso hasta superar los 1.800 dólares.
Sin embargo, la postura menos agresiva de Trump no ha sentado nada bien al oro. Tras marcar el pasado lunes máximos históricos por encima de los 3.500 dólares, el metal precioso cotizaba en torno a los 3.280. La pérdida semanal, que era del 1,1%, tenía lugar tras dispararse un 6,9% y un 2,6% en las dos semanas anteriores.