Aunque las llamadas SPAM fueron prohibidas en España hace casi dos años, siguen siendo un quebradero de cabeza para miles de usuarios. Lejos de desaparecer, estas molestas comunicaciones comerciales han encontrado nuevas vías para colarse en nuestro día a día, desafiando tanto la normativa vigente como las soluciones tecnológicas diseñadas para combatirlas. Pero, ¿hay alguna forma de saber si una llamada es legítima? La respuesta, por fin, parece estar más cerca: solo hay dos números de teléfono que realmente son de fiar.
Las trampas legales
La legislación española, en teoría, ha prohibido las llamadas comerciales sin consentimiento previo. Sin embargo, muchas empresas han aprendido a burlar la ley aprovechando pequeños vacíos legales. ¿Cómo lo hacen? Principalmente, a través del consentimiento que damos al aceptar los términos y condiciones o las cookies en muchas páginas web. Sin que nos demos cuenta, en ese contrato digital también autorizamos a terceras empresas a contactarnos por teléfono.
Este permiso, que suele pasar desapercibido, les sirve a las empresas para justificar legalmente sus llamadas. Otras, directamente, operan al margen de la ley, haciendo llamadas aleatorias sin consentimiento. Y aunque la mayoría de los teléfonos móviles actuales incluyen filtros automáticos de SPAM, lo cierto es que muchos números logran esquivar estos sistemas, forzando al usuario a contestar por si se trata de una llamada legítima.
Mujer enojada y confundida que tiene problemas con el teléfono
Las denuncias se han multiplicado en los últimos meses y desde el Gobierno se ha anunciado una batería de nuevas medidas para frenar este problema. Una de las más destacadas es la obligatoriedad de que todas las empresas que realicen llamadas comerciales utilicen exclusivamente números que empiecen por los prefijos +800 o +900.
los prefijos seguros
La nueva normativa, que entró en vigor a finales de febrero, establece que las únicas llamadas comerciales permitidas serán aquellas que lleguen desde líneas gratuitas identificables con los prefijos +800 o +900. Con esta medida, se pretende facilitar al usuario la identificación inmediata de llamadas de carácter comercial y reducir significativamente el impacto del SPAM telefónico.
Es importante señalar que no todas las llamadas desconocidas deben considerarse sospechosas. Si, por ejemplo, tu banco te llama desde la oficina más cercana, podrá hacerlo desde un número con el prefijo provincial correspondiente (como el 955 en el caso de Sevilla), siempre que la llamada esté relacionada con un servicio contratado o sea claramente identificable como atención al cliente.
Desde organismos como la Agencia Española de Protección de Datos (AEPD) se recuerda que los usuarios tienen derecho a oponerse al tratamiento de sus datos con fines comerciales. Además, existen herramientas como la Lista Robinson (www.listarobinson.es) que permiten a cualquier ciudadano inscribirse para evitar este tipo de comunicaciones.

Hombre enojado gritando al teléfono móvil en casa
Con la entrada en vigor de estas nuevas obligaciones, el Gobierno pretende reducir drásticamente el número de llamadas no deseadas y poner freno tanto al SPAM como a posibles estafas telefónicas. Aun así, la responsabilidad última seguirá siendo del usuario: conviene estar alerta, no compartir información personal por teléfono y verificar siempre la procedencia de la llamada antes de tomar cualquier decisión.
Para más información sobre cómo proteger tus datos personales frente al SPAM, puedes visitar la web oficial de la AEPD: https://www.aepd.es/.