Los campeones salieron aliviados de ‘La Bañera’ de De Kuip. Un gol en el tiempo añadido de Mikel Merino cambió el giro de una eliminatoria que se había complicado con una remontada neerlandesa y España gozará ahora el apoyo de la grada de Mestalla.
De la Fuente sacó a su once de gala con la predisposición de atacar frente a un rival que tenía una propuesta similar. El intercambio de golpes estaba servido.
En este contexto, España golpeó primero. Lamine Yamal recuperó la pelota ante Hato, Pedri la sirvió a Nico Williams, quien marca a la media vuelta. El partido se ponía muy de cara, aunque los neerlandeses no se arrugaron este gol.
La Roja la tuvo con un cabezazo de Morata rozando el poste para hacer más daño, pero a partir de aquí se vio a unos Países Bajos muy diferentes. Frenkie de Jong empezó a dominar el juego y, especialmente, Frimpong hizo mucho daño por la banda derecha ante Cucurella.
Gakpo igualó el tanto inicial de Nico Williams / EFE
Van Dijk avisó a balón parado y se estaba cociendo el empate. Frimpong la volvió a liar, el balón acabó en los pies de Gakpo quien marcó con un tiro seco al primer poste. Un empate que hacía justicia a lo que se estaba viendo sobre el terreno de juego.
Lesión de Cubarsí
La selección se tambaleaba y aún más cuando Pau Cubarsí se torció el tobillo y Fabián pidió rápido el cambio. Con Pau tocado, Zubimendi apareció a balón parado, aunque fue un espejismo.
España no se podía permitir jugar con un futbolista mermado en un duelo de tanta enjundia. Dean Huijsen, nacido en los Países Bajos, entró al campo en medio de una gran pitada. El central del Bornemouth tuvo que escuchar música de viento cada vez que tocaba la pelota.
La selección necesitaba el respiro del descanso, sobre todo tras un trallazo de Reijnders que se fue al larguero. De Kuip apretaba y era el momento de recomponer las ideas.
El aviso no sirvió
Los ajustes no llegaron en el medio tiempo y Frimpong salió como un huracán para servir la pelota a Reijnders, quien marcó el segundo con un disparo cruzado. La Roja no aprendió de sus errores anteriores y se vio superada.
El conjunto de Ronald Koeman estaba muy enchufado y Justin Kluivert trató de sorprender desde la frontal. El equipo buscaba a Lamine como salvavidas, aunque no era suficiente para reacción.

Cubarsí se retiró lesionado y provoca el debut de Huijsen / EFE
Los neerlandeses volaban por las bandas. Gakpo podía con Pedro Porro, igual que Frimpong con Cucurella. La desventaja era mínima y tampoco era cuestión de lanzarse de forma kamikaze al ataque, aunque es difícil frenar el ímpetu de un equipo con mentalidad ganadora como es el español.
Giro radical
A De la Fuente no le gustaba el partido y decidió realizar un triple cambio para la última media hora de encuentro. Dani Olmo, Oyarzabal y Ayoze salieron para dar otro talante al ataque, pese a que ello significó la marcha de un Lamine Yamal que encontró muy pocos socios durante el partido. Pedri fue otro que se fue a la caseta por su relevo natural: Dani Olmo.

Kluivert fue una amenaza para España / EFE
España encontró más juego combinativo por dentro gracias a Olmo. El egarense se deja notar cuando está en el campo y su visión de juego aportó mayor claridad en la zona de tres cuartos.
El equipo, como mínimo, logró estabilizar el partido y frenar la oleada ‘oranje’. Faltaba solo que el pase final fuera más dulce para generar peligro ante unos Países Bajos que empezaron a conformarse con el resultado. Una idea que cogió más cuerpo con la expulsión de Hato después de una dura entrada a Le Normand. Koeman sacó rápido a De Ligt para reforzar la zaga.
De la Fuente buscó más llegada con la presencia de Merino por Fabián y tratar de llevarse un resultado positivo para Mestalla. Un cambio que no pudo ser más acertado. El meta neerlandés no supo detener un tiro de Nico Williams y Merino empató a placer para alimentar las esperanzas españolas.