En las primeras horas de este martes, las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) han reanudado los ataques en la Franja de Gaza, poniendo fin al alto el fuego que se mantenía con el grupo islamista Hamás desde el 19 de enero. Según fuentes del Ministerio de Salud gazatí, al menos 44 personas han perdido la vida en estos bombardeos.
Motivos de la ruptura del alto el fuego
La Oficina del Primer Ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, ha emitido un comunicado en el que se detallan las razones que han llevado a la ruptura de la tregua. Entre ellas, destaca la negativa reiterada de Hamás a liberar a los rehenes que aún mantiene en su poder. Además, el grupo islamista ha rechazado todas las ofertas presentadas por el enviado presidencial de Estados Unidos, Steve Witkoff, y otros mediadores internacionales para extender la primera fase del alto el fuego, que concluyó hace dos semanas sin acuerdo para su continuación.
El comunicado subraya que las FDI están llevando a cabo operaciones en toda la Franja de Gaza con el objetivo de cumplir las metas establecidas por la cúpula política, incluyendo la liberación de todos los rehenes, tanto vivos como fallecidos. Asimismo, se advierte que, a partir de ahora, Israel actuará contra Hamás con una fuerza militar cada vez mayor. Este plan operativo fue presentado por las FDI y aprobado por el liderazgo político el pasado fin de semana.
Reacciones internacionales y contexto
La reanudación de los ataques se produce en un momento delicado, ya que Netanyahu había anunciado recientemente el envío de una delegación a El Cairo para continuar las negociaciones de alto el fuego con Hamás. Sin embargo, la falta de avances y la persistente negativa de Hamás a liberar a los rehenes han llevado a Israel a retomar las acciones militares.
Una vista de la destrucción mientras los palestinos continúan su vida diaria con recursos limitados entre los escombros de los edificios destruidos como resultado de los ataques israelíes en las Torres Sheikh Zayed en Beit Lahia.
La comunidad internacional observa con preocupación esta escalada de violencia. Organizaciones humanitarias han alertado sobre el deterioro de la situación en Gaza, donde, según datos recientes, el número de muertos palestinos desde el inicio de la ofensiva israelí supera los 45.500, con más de 108.000 heridos.
Por su parte, Hamás ha condenado la reanudación de los ataques y ha responsabilizado a Israel de romper la tregua. El grupo islamista ha afirmado que la negativa de Israel a aceptar ofertas para la liberación de más rehenes, incluidos ancianos y familias, demuestra su intención de reanudar la agresión.
Mientras tanto, Estados Unidos ha culpado a Hamás de la ruptura del alto el fuego, argumentando que el grupo no entregó una lista de rehenes que pudiera haber facilitado la extensión de la tregua.
Impacto en la población civil
Los recientes bombardeos han tenido un impacto devastador en la población civil de Gaza. Además de las 44 muertes reportadas esta madrugada, se han registrado numerosos heridos y una destrucción significativa de infraestructuras. Los hospitales, ya desbordados, luchan por atender a las víctimas en medio de cortes de electricidad y escasez de suministros médicos.
Familiares y simpatizantes de los 59 rehenes israelíes restantes retenidos en Gaza protestan en la Puerta de Begin del Cuartel General Nacional de las Fuerzas de Defensa de Israel (HaKirya) para un acuerdo inmediato sobre los rehenes 522 días después de su cautiverio y el fin de la guerra.
La situación humanitaria en la Franja de Gaza es crítica. Miles de personas han sido desplazadas de sus hogares y enfrentan condiciones extremas, especialmente con la llegada del invierno. Las organizaciones internacionales han hecho repetidos llamamientos para permitir la entrada de ayuda humanitaria y garantizar la protección de los civiles atrapados en el conflicto.
