Pensar que esto son balas y cañones es no tener ni idea

El debate sobre el rearme y el aumento de gasto en materia de Defensa está servido en la mesa de toda Europa. En el propio Gobierno de España se percibe una división entre sus dos socios de coalición. Por un lado el Partido Socialista, con Pedro Sánchez a la cabeza y reuniéndose con los demás líderes de la unión, para coordinar una respuesta a las crecientes amenazas y cambios en el panorama internacional que llegan desde ambos lados del continente. Por otro Sumar, con la ministra de Trabajo y vicepresidenta segunda del Ejecutivo, YolandaDíaz, que no quiere que un incremento de la partida de Defensa perjudique el escudo social. A su vez los distintos socios que componen Sumar (Izquierda Unida, Más País, Compromís, etc.) tienen posturas aún mas opuestas ala del PSOE.

Arantxa Tirado, politóloga y colaboradora habitual de ‘Espejo Público, ha descrito recientemente en sus redes sociales la postura de Pedro Sánchez de supremacista, por defender el aumento del presupuesto de Defensa.

«Sólo los malvados quieren la guerra»

La política y exmilitar Zaida Cantera, exdiputada del Partido Socialista en el Congreso, manifestaba su postura, claramente opuesta a la de la de Tirado: «Estoy cansada de que la gente sea tan naive o nos quiera transmitir que vivimos ‘en los mundos de yupi’«.

«Nadie nos lo ha regalado», expresaba la exmilitar, que aseguraba que el estado de bienestar europeo, servicios públicos y calidad de vida de los que se puede disfrutar en Europa, se deben a unos valores fundamentales que sustentan la democracia. Valores que necesitan de una defensa activa.

La excomandante Cantera negaba que el asunto del gasto en defensa se reduzca a fabricar armamento y munición. Explicaba que la inversión no está destinada exclusivamente a esos propósitos y sentenciaba: «Sólo las personas malvadas quieren la guerra».

El presupuesto de Defensa, en palabras de la exdiputada, se asigna a inteligencia, tecnología y también en sanidad: «Pensar que esto son balas y cañones es no tener ni idea de lo que es la seguridad de un país«.

«No es más que propaganda»

Se daba por aludida la politóloga por las palabras de la exmilitar, y contraatacaba. Tachaba de propaganda las acusaciones de la exmilitar a quienes tengan una postura diferente y contraria a las carreras armamentísticas: «Los incentivos de un país a armarse provocan que otro país se arme y se entre en una paradoja que mina la seguridad recíproca«.

Los beneficiados de la guerra

Más tarde Arancha Tirado aludía a los intereses económicos tras la industria armamentística y aquellos que están «frotándose las manos» con el rumbo de las relaciones internacionales: «La guerra es un gran negocio donde unos pocos ganan y la mayoría va a perder».

Respondía de inmediato y de manera tajante Zaida Cantera: «He sido militar y estoy hasta las narices de que digan que los militares queremos la guerra. ¡No!, Queremos la seguridad».

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