El instituto IES Simón Pérez está impregnado de un aura europea. Nada más entrar por sus puertas, se pueden apreciar murales y cartulinas colgadas en las paredes que ofrecen información para hacer Erasmus, explican la idiosincrasia del Parlamento Europeo (PE) o muestran los países que lo integran. No es para menos, ya que el centro representó a Canarias este enero en la jornada Euroscola, en Estrasburgo, como una de las Escuelas Embajadoras del Parlamento Europeo (EPAS).
Euroscola es un proyecto del PE orientado a la juventud en el que estudiantes de secundaria emulan el funcionamiento rutinario de este organismo durante un día. Uno de los principales objetivos que plantea es la «difusión de sus valores y derechos democráticos«, así como «acercar la realidad política a los jóvenes», tal y como explica Manuel Ruiz, profesor y coordinador de la iniciativa en el IES Simón Pérez.
Medioambiente y polución
El grupo de estudiantes de cuarto de la ESO visitó la sala plenaria del Parlamento el pasado 28 de enero. Desde allí, se dividieron en grupos para participar en un debate sobre el medioambiente y la contaminación junto con otras EPAS de distintos países. Después tuvieron la oportunidad de hacer preguntas al vicepresidente del PE, Esteban González Pons, sobre las políticas y metas de la Unión Europea (UE) con respecto a la polución.
Uno de los comentarios destacados fue el de una alumna del centro que quiso saber cómo abordará la UE el aumento de las catástrofes naturales en el planeta. En general, toda la clase se muestra preocupada por el cambio climático y el medioambiente, siendo la contaminación del agua el tema que menciona un estudiante con especial atención.
El alumnado que fue a Estrasburgo hablando en las escaleras del IES Simón Pérez / Juan Carlos Castro
El hecho de que hubiera traductores fue una sorpresa para el grupo a la que se sumaron los nervios por estar en el Parlamento. No obstante, poco a poco fueron soltándose y se atrevieron a compartir sus puntos de vista. Así lo explica la jefa de estudios del instituto, Belén Díaz Pavón, quien asegura que el viaje fue «muy gratificante» y transmitió mucho «entusiasmo» al alumnado que pudo participar.
Responsabilidad y privilegio
Antes del viaje, prepararon sus contribuciones al debate con unas fichas en las que desarrollaron sus argumentos. También tuvieron tiempo de hablar sobre los derechos de las mujeres partiendo de múltiples perspectivas. Para una de las alumnas fue una experiencia muy interesante, dado que pudo analizar las problemáticas y necesidades que hay en distintos localizaciones geográficas. Por ejemplo, menciona que el cruce entre machismo y racismo no se produce de la misma forma en todos los países europeos.
Ella misma apuntó que fue una «responsabilidad» y un «privilegio» haber estado en el Parlamento, sobre todo porque no todas las EPAS tienen la misma oportunidad. Asimismo, compartieron a través de encuestas anónimas cuáles son las carencias y necesidades que, en su opinión, tiene la Unión Europea.
Oportunidades de movilidad
A pesar de la lejanía geográfica de las Islas, consideran que desde la UE «tienen en cuenta» a Canarias: «Se acuerdan de nosotros, aunque pensemos que no». A su parecer, uno de los aspectos que refleja su implicación son las oportunidades que les brindan intercambios como el Erasmus, en el que una de las alumnas ya ha participado dos veces, una en Polonia y otra en Dinamarca.
Tenía 13 años la primera vez que decidió vivir la experiencia, y desde entonces tiene claro que quiere repetir por todo lo que pudo aprender en el extranjero. Ese es uno de los pilares del centro, que tiene un enfoque europeizador desde antes de haberse unido al programa del PE, en el que ya llevan tres años.
![El alumnado del IES Simón Pérez que fue al Parlamento Europeo en el patio de su instituto](https://estaticos-cdn.prensaiberica.es/clip/bdd627ce-7db5-486f-909e-e192be068498_alta-libre-aspect-ratio_default_0.jpg)
El alumnado del IES Simón Pérez que fue al Parlamento Europeo en el patio de su instituto / Juan Carlos Castro
En este sentido, el vicedirector del instituto, Alejandro Carrasco Nogales, apunta que estas son «oportunidades cruciales, y más en un ambiente como este, donde la mayoría no van a salir y a hacer muchas cosas si no las fomentamos aquí en el centro».
De hecho, tal y como cuenta el profesorado, muchos de los estudiantes canarios apenas han salido del Archipiélago, habiendo incluso algunos que nunca antes habían subido a un avión. También hay un importante segmento de alumnado migrante, a pesar de ser un instituto pequeño con tan solo unos 150 estudiantes, por lo que es un centro «bastante heterogéneo«.
Familiarizarse con las leyes
Desde que su profesor, Manuel Ruiz, les contó que irían a Estrasburgo, estuvieron «dos meses con la cabeza loca» y mucha ilusión. En ese sentido, Ruiz señala que han podido apreciar una evolución en positivo: «Al principio nos teníamos que pelear para que fueran niños a los Erasmus, pero ahora cada vez son más los que quieren. Para ellos ha sido una apertura de mente«.
Por otro lado, Díaz, la jefa de estudios, destaca que proyectos como Euroscola les ha permitido entender cómo afecta la política al día a día de las personas. Si bien se les escapa el funcionamiento y la aplicación de muchas normativas, pueden hacer un primer acercamiento a través de cuestiones que les resultan comunes, como la implantación del enchufe universal.
Así, poco a poco, van entendiendo leyes complejas y sabiendo diferenciar las que son locales de las que son nacionales o internacionales. Además, las actividades que realizan a menudo con el foco en la UE ayudan a fomentar el «sentimiento de pertenencia a Europa«.
El instituto evoluciona
Después de 19 años en el centro, Díaz indica que «ha cambiado mucho» en los últimos años y que «va a mejor» gracias a estas iniciativas. Incluso, rememora, hubo una ocasión en que llevaron a un grupo de estudiantes a Turquía.
Al entrar al proyecto Euroscola, hay un periodo máximo de tres años en el que pueden participar como EPAS. Por ello, el próximpo curso se les abrirá una nueva vía: convertirse en escuela mentora y ampliar su colaboración con otros centros.
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