La Real Federación Española de Fútbol (RFEF) va a polémica por día. Aunque las futbolistas accedieron a jugar los partidos de la Nations League tras una reunión de urgencia en la que estuvo presente el Consejo Superior de Deportes (CSD), siguen reclamando cambios en el organigrama de la RFEF. Una de las cabezas que podrían haber pedido es la de Albert Luque, director de la selección masculina del que ahora se han filtrado unos audios en los que ataca duramente a Jenni Hermoso defendiendo a Luis Rubiales.
«Me parece tan injusto, tan injusto, lo que se le está haciendo a Luis. Me parece de tanta bajeza humana la actitud de Jenni… Tan poca empatía y humanidad», decía Albert Luque en un mensaje de WhatsApp filtrado por El Mundo.
El director de la selección masculina, imputado por la Audiencia Nacional por un presunto delito de coacciones, recrimina a la futbolista el no haber tenido «un simple gesto» para «quitarle» a Luis Rubiales el «marrón más grande de su vida» porque Jenni Hermoso sabía que «mala fe cero».
«Sólo le deseo que la vida le devuelva lo que está haciendo pagar a una persona injustamente», señalaba, molesto, Albert Luque.
Las últimas declaraciones de Rubiales sobre Jenni Hermoso
El Español, por su parte, filtraba horas antes lo que dijo Luis Rubiales ante el juez el pasado 15 de septiembre: «Ganamos un Mundial, hay muestras de afecto. Esto no es que alguien ha llevado a una oficina a alguien a escondidas a darle un beso por la fuerza. No. Es que fue algo tan natural, a la luz de millones de ojos, entre dos personas que han estado conviviendo mucho tiempo».
«Vamos… ¡si es que le pregunté antes! ¿Cómo no la voy a respetar? Y ella se fue muerta de risa y dándome dos cachetes en el costado», agregó.
Sobre por qué no pidió perdón a Jenni Hermoso, justificó: «¿Cómo le voy a pedir perdón si estábamos los dos supercontentos?». Y refiriéndose a la futbolista, Luis Rubiales añadió: «Falta a la verdad hasta cuando dice que tengo dos hijas, porque son tres».
Tras la polémica surgida por su beso a Jenni Hermoso, Luis Rubiales aseguró: «Lo que queríamos era cortarlo y no crear un problema que se ha creado de algo que era una anécdota y que, seguramente en cuanto a decoro y demás, no fue lo adecuado pero que no había nada más». Según dijo, fue ella la que se lo pidió: «Acabamos con esto, que esto me va a hacer mucho daño». «Le dije: ‘Oye, mis hijas están aquí, están sufriendo. Podemos acabar ya con esto’», concluyó Luis Rubiales.
