El miércoles, Donald Trump, presidente de Estados Unidos, firmó una orden ejecutiva que clasifica a Ansar Allah, conocidos como los hutíes, como una organización terrorista extranjera.
La orden resalta que “con el respaldo de la Fuerza Quds del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica de Irán (CGRI-QF), los hutíes, quienes reciben armas y entrenamiento, han atacado buques de guerra de la Marina estadounidense decenas de veces desde 2023, poniendo en riesgo la vida de militares estadounidenses”.
Según el documento, desde que tomaron el control de la mayoría de las áreas pobladas de Yemen en 2014-2015, los hutíes han lanzado múltiples ataques contra infraestructura civil, incluidos aeropuertos en Arabia Saudita, atentados en los Emiratos Árabes Unidos en enero de 2022 y más de 300 proyectiles lanzados contra Israel desde octubre de 2023.
La orden también menciona que han llevado a cabo más de 100 ataques contra buques comerciales en Bab al-Mandeb, y provocó la muerte de al menos cuatro marineros civiles y provocando desvíos en el tráfico marítimo del mar Rojo, lo que ha impactado la inflación global.
“Las acciones de los hutíes representan una amenaza para la seguridad de civiles estadounidenses en Medio Oriente, los aliados regionales y el comercio marítimo internacional”, señala el texto.
Durante su primer mandato, Trump ya había designado a los hutíes como organización terrorista días antes de finalizar su administración en 2021. No obstante, el entonces secretario de Estado, Antony Blinken, revocó la designación argumentando que podría dificultar la ayuda humanitaria a Yemen.
Desde octubre de 2023, los hutíes han intensificado sus ataques en la región, utilizando drones contra Israel y atacando barcos comerciales en apoyo a Gaza. Ante esta escalada, Estados Unidos lideró la formación de una coalición con más de 20 países para proteger el comercio en el mar Rojo.
A pesar de los repetidos bombardeos de la coalición sobre instalaciones y arsenales hutíes en Yemen, los rebeldes han mantenido su postura y declarado su intención de continuar con los ataques.
En declaraciones recientes, los hutíes anunciaron que, durante el alto el fuego entre Israel y Hamás, restringirán sus ataques en el mar Rojo a buques relacionados con Israel, aunque advirtieron que retomarán acciones si el alto el fuego se rompe.