La llegada de los seis primeros F-35B para la Fuerza Aérea de Autodefensa de Japón se retrasa, sin fecha concreta de entrega.
El aplazamiento de los F-35B
La entrega de los primeros seis aviones F-35B a la Fuerza Aérea de Autodefensa de Japón (JASDF), programada originalmente para el año fiscal 2024, ha sido pospuesta para el año fiscal 2025. Aunque la fecha exacta aún no ha sido definida, este retraso se ha confirmado oficialmente. El ministro de Defensa japonés no ofreció explicaciones sobre las razones detrás del cambio en el cronograma.
Lockheed Martin, fabricante del F-35, reanudó las entregas de esta aeronave en julio de 2024 tras el levantamiento de la pausa impuesta por el Pentágono. Este alto en la producción, que duró un año, fue consecuencia de problemas relacionados con la implementación de la actualización TR-3 (Technology Refresh 3), que aún estaba en desarrollo. Esto afectó tanto a clientes militares de Estados Unidos como a compradores extranjeros.
En Japón, los primeros F-35B serán desplegados en la base aérea de Nyutabaru, en el sur de la isla de Kyushu. Esta base, actualmente equipada con interceptores F-15J/DJ, ha sido elegida por su cercanía al puerto del JS Kaga, un buque de la Fuerza Marítima de Autodefensa de Japón (JMSDF) ubicado en la prefectura de Hiroshima. Mientras tanto, los preparativos para el establecimiento de un escuadrón temporal dedicado al F-35B avanzan como estaba planeado y culminarán a finales del año fiscal 2024.
El ministro de Defensa japonés, Nakatani, declaró: “Entiendo que no habrá un impacto importante por este retraso en la entrega, pero, en cualquier caso, para minimizar el impacto, continuaremos trabajando con la parte estadounidense hacia el despliegue y avanzaremos de manera constante en el trabajo para aceptar el despliegue del escuadrón temporal F-35B que se establecerá este año fiscal”. Además, aseguró que los próximos lotes de entrega no deberían verse afectados por este aplazamiento.
Características y capacidades del F-35B
- El F-35B es una plataforma STOVL (Short Take-Off and Vertical Landing), que permite despegues y aterrizajes desde pistas cortas o verticalmente.
- Diseñado originalmente para el Cuerpo de Marines de los Estados Unidos (USMC), también es operado por fuerzas aéreas de Italia, Reino Unido y Singapur.
- Incorpora un sistema de propulsión avanzado con una tobera giratoria y un ventilador de sustentación para operaciones verticales.
- Equipado con sensores de última generación, como el radar AESA AN/APG-81 y sistemas de orientación avanzados como el EOTS y el DAS.
- Proporciona capacidades multifunción avanzadas que incluyen vuelo supersónico, capacidad furtiva y operatividad desde pistas inaccesibles para otras aeronaves.
Preparativos japoneses para la integración del F-35B
Japón tiene previsto operar hasta 42 unidades del F-35B y 105 del F-35A, junto con su flota existente de F-15J/DJ y F-2A/B. Las operaciones del F-35B incluirán su despliegue desde los buques de la clase Izumo, que están siendo transformados para permitir el uso de estas aeronaves STOVL.
En 2021, el JS Izumo completó la primera fase de sus modificaciones, incluyendo el recubrimiento de su cubierta de vuelo con pintura resistente al calor. Posteriormente, este buque vio el aterrizaje de un F-35B durante pruebas realizadas en colaboración con el Cuerpo de Marines de los Estados Unidos.
El JS Kaga, por su parte, inició su remodelación en marzo de 2022 en el astillero de Kure, en Hiroshima. En 2024, imágenes publicadas por la JMSDF mostraron su nueva cubierta de vuelo rectangular, diseñada para operar con el F-35B. Se espera que los trabajos en el Izumo se completen a finales del año fiscal 2024.
Además de las modificaciones estructurales, ambos buques han adaptado sus compartimentos internos y depósitos para apoyar operaciones de los F-35B, aunque seguirán denominándose “destructores multifuncionales” debido a restricciones constitucionales que prohíben la posesión de portaaviones ofensivos.
Ventajas estratégicas de operar el F-35B desde buques Izumo
Expertos estadounidenses destacan el potencial defensivo de operar el F-35B desde los buques de la clase Izumo. Según el Instituto Naval de Estados Unidos (USNI), estas aeronaves permitirán extender el alcance de vigilancia y defensas en cientos de millas, ampliando significativamente las capacidades de la JMSDF.
“Detectar y destruir los barcos y aviones atacantes antes de que puedan lanzar sus armas es el mejor medio para defender la flota de Autodefensa”, señaló el USNI. La colaboración entre la JMSDF, la JASDF y las fuerzas estadounidenses refuerza la estrategia defensiva de control marítimo mediante el uso de estos aviones.
Con las modificaciones completas, el JS Izumo comenzará operaciones con el F-35B en 2027, seguido del JS Kaga en 2028. Ambos buques representan un componente clave en la evolución de las capacidades defensivas de Japón.