La Asociación de Navegantes ADN Mediterráneo ha nombrado presidente a Bartolomé Albons Monserrat, de 68 años, un histórico del narcotráfico de Mallorca que ha sido condenado varias veces por grandes alijos de droga durante los últimos cuarenta años. En su página web la asociación presenta a Albons como un «veterano navegante» que presidirá una junta directiva «muy transversal y variada, en la que se ha buscado que estén representados todos los perfiles de navegantes». La nueva junta representará a la asociación en las reuniones con el Govern en la denominada Mesa Náutica, junto a representantes de empresas y profesionales del sector.
Bartolomé Albons fue condenado por última vez en marzo de 2010, cuando la Audiencia de Palma le impuso una pena de cuatro años de cárcel por tratar de introducir en Mallorca junto otros tres cómplices una partida de diez kilos de heroína en una lancha motora que partió del puerto de Cambrils (Tarragona).
Primer arresto en 1983
Fue la última de una larga lista de problemas con la ley, desde que en 1983 fue arrestado por un alijo de 400 kilos de hachís intervenido por la Guardia Civil en s’Estanyol en la operación Spanish Jade, junto al menorquín Alberto Barber Pons, otro de los históricos del narcotráfico en Baleares.
A lo largo de las tres décadas siguientes Albons fue detenido y condenado por otras grandes operaciones policiales, como la que permitió el alijo de 3.450 kilos de hachís entre diciembre de 1991 y marzo de 1992. En aquella ocasión Albons mantuvo que actuaba como confidente para la unidad antidroga de la Guardia Civil. Estas revelaciones dieron pie al caso Ucifa, en el que se procesó a altos mandos de la Guardia Civil por pagar con droga a informadores. En los años siguientes, Albons estuvo implicado en otras grandes intervenciones de droga, como las de la operación Alisio o la operación Pelícano.
«Trabaja ya a pleno rendimiento»
La Asociación de Navegantes ADN Mediterráneo informó ayer en su página web que la nueva junta directiva, presidida por Albons, «ya ha tomado posesión y trabaja a pleno rendimiento para poner a la asociación en el lugar que le corresponde en el panorama institucional náutico de Baleares y el Mediterráneo».
En la misma nota se explica que, tras la dimisión del anterior presidente, Alfredo Fuster, la candidatura de Albons fue la única que se presentó, «por lo que fue elegida sin necesidad de elecciones el pasado mes de diciembre».
La nueva junta, añaden, «ya está trabajando de forma muy activa para representar a los navegantes en la Mesa Náutica», una mesa sectorial creada por el Govern y en la que también están representados las empresas y profesionales para tratar sobre los principales problemas del sector.
La asociación es la única institución que agrupa a los aficionados a la náutica de recreo de las islas, y cuenta con 650 socios. A lo largo del primer trimestre tiene previsto celebrar actividades como la Fiesta del Navegante, una cena de socios, y diferentes charlas y coloquios sobre temas de interés para los navegantes.