Desde que Zendaya acudió a los Globos de Oro no se habla de otra cosa. Su impresionante vestido naranja de Louis Vuitton quedó en un segundo plano por detrás del anillo de compromiso en el dedo anular izquerdo (según varios medios, un «diamante de corte cojín» valorado en 200.000 dólares de la joyera británica Jessica McCormack) y del pequeño tatuaje con una ‘t’ minúscula que dejó a la vista por encima del corpiño.

Fuente