Yolanda Díaz ya tiene candidatos para integrar el eventual Gobierno de coalición. Y entre ellos, dos de las figuras políticas más próximas a la dirigente como son la líder de Más Madrid, Mónica García, y la exalcaldesa de Barcelona y líder de los comuns, Ada Colau. La vicepresidenta en funciones quiere en el Consejo de Ministros a estos dos perfiles, que le han apoyado desde el comienzo de su andadura en solitario, que estuvieron en el primer acto de Díaz en Valencia, hace ahora dos años, y le acompañaron en el lanzamiento de Sumar el pasado abril. Las negociaciones con el PSOE, aún en fase preliminar, decidirán la composición definitiva del encaje de bolillos que a día de hoy es el reparto de ministerios.
Sumar ha reclamado cuatro áreas de Gobierno, una menos de los que tiene actualmente Unidas Podemos, debido a la reducción de carteras. Dos de ellas están más o menos aseguradas, como es el caso del Ministerio de Trabajo, que seguirá en manos de Yolanda Díaz, y de Derechos Sociales, ahora ocupada por Ione Belarra y con Nacho Álvarez, actual secretario de Estado del mismo departamento, como principal candidato para sucederle.
El resto de materias que han trasladado al PSOE están pendientes de las negociaciones, que la semana pasada avanzaron en lo programático pero que son todavía iniciales en cuanto a organigrama de Gobierno. Los de Díaz dan por seguro que obtendrán tres ministerios, pero avanzan que buscarán contar con un cuarto, planteando distintas opciones posibles.
Entre los asuntos más difíciles de abordar en las negociaciones está el Ministerio de Igualdad, cuya batalla está por librarse después de que los socialistas hayan mostrado interés en recuperar la cartera tras cerrar la puerta a que continúe al frente Irene Montero.
La coalición de izquierdas quiere mantener este baluarte, especialmente simbólico en la izquierda, al considerar que un perfil socialista podría suponer un retroceso en materia feminista. La insistencia de Yolanda Díaz por mantener este departamento jugará también una baza en las conversaciones para encajar el resto del puzzle de Gobierno.
Sanidad, para García
Uno de los ministerios que Yolanda Díaz quiere incorporar a la cuota Sumar es Sanidad, ahora en manos de los socialistas. Este departamento tiene escasas competencias, al estar transferidas a las comunidades autónomas, y en el PSOE no se cierran a esta cesión, que recaería sobre la líder de Más Madrid, Mónica García. La dirigente, líder de oposición a Isabel Díaz Ayuso en la Asamblea de Madrid, ha centrado gran parte de su discurso en el ámbito sanitario, y ha abierto un frente por este asunto al ejecutivo regional.
Médico de profesión y con proyección nacional, García guarda buena sintonía con Díaz. Las dirigentes abordaron la posibilidad de que la madrileña ocupase esta cartera en una reunión hace dos semanas, el pasado 19 de septiembre, en el Ministerio de Trabajo. La gallega es favorable a esta opción, al valorar positivamente el perfil de la madrileña, aunque su designación queda a expensas del reparto final de ministerios.
La petición de Más Madrid llega en un contexto muy concreto, tras dos años apoyando incondicionalmente a la gallega, y después de quedar fuera del reparto de portavocías en el Congreso de los Diputados. Una situación que ahora quieren ver compensada en el organigrama de Gobierno.
En los últimos días, Mónica García ya ha defendido la necesidad de «ensanchar» la organización y ampliar su ámbito de influencia a todo el territorio nacional. Una tarea para la que se ha comprometido «en primera persona». «Vamos a más para seguir siendo ese referente de progreso en Madrid y ese referente de progreso en España«, apuntó García en la apertura de Congreso de Más Madrid el pasado viernes, donde mostró su intención de «defender los intereses de los madrileños a la vez que arrimamos el hombro en primera persona por nuestro país«. La afirmación cobra especial sentido al tratarse de la principal candidata de Yolanda Díaz para liderar la cartera de Sanidad.
Vivienda y ecologismo
Otra de las áreas que Yolanda Díaz quiere para Sumar en el Consejo de Ministros es vivienda, una competencia ahora integrada en Transportes, y que quiere elevar a la categoría de ministerio para poner al frente a Ada Colau, una de sus principales valedoras políticas, que ha puesto su organización, los comuns, al servicio del proyecto de la gallega. Este departamento, aunque tiene un alto nivel simbólico, tendría también escasas competencias, que podrían suplirse incluyendo áreas verdes, relativas a la eficiencia energética o sostenibilidad. Este apéndice daría salida a una de prioridades programáticas de Sumar, como es el ecologismo.
No en balde han reclamado los de Díaz un área de Descarbonización, en forma de secretaría de Estado en el Ministerio de Transición Energética de Teresa Ribera, aunque admiten que la fórmula mixta de Gobierno -con cargos de distintos partidos conviviendo en un mismo ministerio- es un extremo que el PSOE es reacio a aceptar. Sería por tanto en Vivienda donde podrían adscribirse las competencias verdes que reclama Sumar.
Ada Colau es un perfil ambivalente que bien podría dirigir el área de vivienda, como Igualdad o Derechos Sociales
Colau es una de las figuras que la vicepresidenta segunda quiere llevar a Madrid, y le considera una figura ambivalente, que encajaría a la perfección en materia de vivienda, pero que también es una opción firme ocupar otras áreas como Igualdad o Derechos Sociales, ésta última en caso de declinar la primera opción de Nacho Álvarez, que ha mostrado su intención de dejar la política.
El destino de Colau, sin embargo, dependerá en buena medida de los próximos pasos en la política barcelonesa, donde el actual alcalde Jaume Collboni puede dar entrada a los comuns en el gobierno local; unas negociaciones que se producen en paralelo a las conversaciones con el PSOE a nivel nacional.