A pesar de las tensiones del pasado, el amor y la fe de la pareja han conseguido obrar un milagro: Halis y Kazım han dejado a un lado sus diferencias.
Halis se ha dirigido a todos con un discurso que ha tocado sus corazones: «Cuando una persona llega a esta edad, aprende lo corta que es la vida y lo importante que es reparar un corazón roto en lugar de romperlo».
El patriarca de los Korhan, consciente del enfado de Kazim, ha asumido su parte de culpa. «Estás molesto y ofendido, y tienes toda la razón», ha dicho dejándolo sin palabras.
Sorprendiendo a todos, Halis le ha pedido su bendición. Kazim, emocionado, no solo se lo ha dado, sino que ha sellado el momento con un abrazo y un beso en la mano de Halis, diciendo: «No pasa nada».
Este milagro de Año Nuevo significa un nuevo comienzo para ambas familias. Ferit y Seyran, radiantes de felicidad, han visto cómo su sueño de unir a todos en paz se hace realidad, marcando el inicio de un año lleno de esperanza y unión familiar.