Más del 60% de los transportistas españoles se oponen a la legalización de los camiones de 44 toneladas. La tendencia irrefrenable en Europa de incrementar el tamaño de los vehículos de transporte, sean megacamiones, articulados o de otro tipo, llegará a España el próximo año. El objetivo es reducir las emisiones contaminantes e impulsar el cambio del parque de vehículos. Pero el sector del transporte está disgustado con el horizonte que se dibuja. La patronal del transporte Fenadismer y la multinacional Continental han presentado el resultado de una encuesta que pone de manifiesto las inseguridades de un sector agobiado por los cambios y con escasa capacidad de inversión. Según este estudio, la práctica totalidad de los transportistas reconocen tener dificultades para contratar nuevos conductores, solo un 11% lo considera fácil. Pese al gran desconocimiento del marco legal en preparación, queda claro que los profesionales consideran que el anunciado aumento de carga a las 44 toneladas es percibido de manera negativa, donde más de un 30% considera que esta medida les obligará a abandonar su actividad

Fuente