La movilidad eléctrica está transformando nuestras ciudades a una velocidad vertiginosa, pero su adopción masiva plantea desafíos. Uno de los más relevantes es la necesidad de adaptar los edificios, tanto residenciales como de oficinas, para que puedan responder a las exigencias de recarga de vehículos eléctricos. La antigüedad de muchas construcciones en España, junto con infraestructuras que fueron concebidas en una era previa a esta revolución, está poniendo a prueba la capacidad de respuesta de arquitectos, propietarios y administraciones públicas.
Los edificios más antiguos se enfrentan a retos estructurales evidentes. Muchos carecen de canalizaciones adecuadas en los garajes, tienen sistemas eléctricos obsoletos o simplemente no cuentan con el espacio necesario para albergar nuevos equipos. Esta realidad se combina con las dificultades técnicas y logísticas que supone distribuir la carga eléctrica de manera eficiente, evitando sobrecargas en la red, y cumplir con normativas que no siempre están adaptadas al avance de la tecnología. Estas barreras están ralentizando el crecimiento de la movilidad eléctrica, generando incertidumbre en los potenciales usuarios, que dudan en dar el salto por la falta de una infraestructura adecuada.
Soluciones de recarga
Sin embargo, las soluciones no tardan en llegar y así, en este contexto, surge ChargeGuru, una compañía europea experta en recarga de vehículos eléctricos que propone su solución de recarga colectiva en España, tanto para edificios residenciales como de oficinas, que rompe con esta barrera, haciendo accesible y escalable la instalación de puntos de recarga en cada una de las plazas del garaje, sea del tipo que sea. Para Adrien Castagnié, director general de ChargeGuru Iberia, “El objetivo es ayudar a las empresas y particulares en su transición a la movilidad eléctrica, preparando los edificios con soluciones de recarga escalables y seguras. Pretendemos ser los socios ideales de Propietarios y Gestores de Edificios en este sector de la movilidad eléctrica”. También las barreras económicas han frenado en muchos casos la implementación de estas tecnologías. Para hacer frente a este problema, están surgiendo modelos de financiación innovadores que alivian la carga financiera sobre las comunidades de propietarios.
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En este contexto, algunos casos de éxito están mostrando cómo se pueden superar estas barreras y marcar el camino hacia un futuro electrificado. En el caso de ChargeGuru, el servicio es privado para las empresas y/o residentes que forman parte del edificio. Los puntos de recarga se instalan, a medida que se vayan solicitando, en todas las plazas de aparcamiento, con una disponibilidad del 100%, a diferencia de otras opciones que están al alcance del público en general. Este servicio prestado garantiza toda la gestión y el mantenimiento a través de un técnico especializado, además de ofrecer asistencia gratuita al cliente y ChargeGuru realiza la preinstalación destinada a la recarga eléctrica de manera gratuita, de forma segura y escalable. Con este servicio de recarga por suscripción mensual, pagan sólo los residentes o las empresas inquilinas del edificio que utilicen el servicio y el propietario del edificio nunca asume costes.
El acceso al servicio incluye la recarga, la asistencia técnica y el acceso al software de monitorización y gestión integral con el que podrán ver en tiempo real el estado de todas las estaciones de carga. La integración de puntos de recarga en edificios no solo facilita el acceso a la movilidad eléctrica, sino que también mejora la sostenibilidad urbana. Los vehículos eléctricos, especialmente aquellos que se alimentan con energía renovable, contribuyen a la reducción de emisiones de CO2 y mejoran la calidad del aire en áreas densamente pobladas.
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Además, la integración de paneles solares y sistemas de almacenamiento energético en los edificios ofrece la oportunidad de crear comunidades energéticamente independientes, reduciendo la presión sobre la red eléctrica nacional.
Aunque las perspectivas son alentadoras, el camino hacia la electrificación completa de nuestros entornos urbanos no está exento de desafíos. La escalabilidad de estas soluciones será crucial a medida que el número de vehículos eléctricos siga creciendo. Al mismo tiempo, será necesario garantizar que la transición sea equitativa y accesible, evitando que la falta de recursos económicos o técnicos deje fuera a ciertos sectores de la sociedad. Soluciones eficaces como la de ChargeGuru se muestran contundentes; la compañía opera ya en 8 países de Europa y tiene presencia local en cada uno de ellos, especializándose en soluciones de recarga para particulares y empresas. Tras su éxito en Francia, donde 700 edificios de oficinas y 15.000 edificios residenciales ya han adoptado los servicios de ChargeGuru, la empresa está preparada para satisfacer la creciente demanda de movilidad sostenible en toda Europa.
