La batalla entre Antonio Canales y su casera continúa. Después de que esta le acusara de inquiokupa, el bailaor ha contraatacado, denunciándola por coacciones.
En la denuncia, Canales afirma que Pilar, la propietaria, ha dejado la luz en 100W, por lo que no puede encender aparatos de primera necesidad en pleno invierno. El bailaor asegura que vivir allí es inhumano.
Hoy mismo se ha celebrado el juicio, al cual Pilar no ha asistido. A la salida, hemos podido hablar con Canales, que tacha a la casera de extorsionadora. «El que la hace la paga, y esto es el principio y de una larga caminada», señala.
Sin embargo, Rogelio Gómez, el portavoz de la casera, afirma que no tirarán la toalla y que están dispuestos a desahuciarle. ¿Hasta dónde llegará el conflicto entre ambos?