El Betis, con una sorprendente derrota en el campo del Mladá Boleslav checo (2-1), se complicó la vida en su intención de superar esta fase de la tercera competición continental, una Liga Conferencia en la que, tras cuatro partidos, solo suma cuatro puntos de doce posibles.
La formación sevillana defraudó de nuevo en este torneo y, en un pésimo partido, encajó su segunda derrota en la cuarta jornada al caer ante el Mladá Boleslav, que remontó en solo tres minutos el gol en el 17 del argentino Giovani Lo Celso -expulsado en la recta final- con tantos de Vojta (m.51) y Vydra (m.54).
El Betis salió con un once ofensivo al Lokotrans Arena, con la novedad de Lo Celso en el centro del campo, Juanmi Jiménez de extremo y el brasileño Vitor Roque y el argentino Chimy Ávila como delanteros. El técnico de la formación sevillana, el chileno Manuel Pellegrini, introdujo siete cambios respecto al equipo titular que perdió el pasado sábado por 4-2 en Valencia en LaLiga y en la República Checa sólo repitió con Aitor Ruibal, Natan de Souza, Sergi Altimira y Vitor Roque.
El objetivo estaba claro, ganar para reconducir la situación en este torneo, y parecía a priori que el rival, décimo del campeonato liguero checo y que aún no había puntuado en las tres jornadas anteriores de este torneo, era propicio en el partido número cien de los béticos en Europa.
Los pronósticos no fallaron y un poco después del primer cuarto de hora el Betis, que había mandado desde el principio, abrió el marcador con un lanzamiento de un libre directo al borde del área que botó Lo Celso.
Tras el 0-1 no cambió el guion, con el equipo visitante al frente de la situación al mostrar superior nivel técnico y mejor circulación del balón, aunque en el debe estuvo el que no apretó lo suficiente para encontrar el segundo tanto. Esa carencia se unió a la falta de intensidad en la fase final del primer período, lo que aprovechó la formación que dirige el sueco Andreas Brännström para creérselo, ir con descaro hacia la portería del Betis y tener media docena de llegadas antes del descanso.
Entonces surgió la figura del meta Adrián San Miguel, que en un par de intervenciones, primero ante Matyás Vojta y después ante Tomás Ladra, evitó un empate que no llegó en la primera parte, aunque sí las muchas dudas dejadas en el descanso por los verdiblancos.
No tardó Pellegrini en mover el banquillo para recomponer la situación y desde el arranque de la segunda mitad hizo ingresar en el centro del campo al canterano Mateo Flores en el lugar de Vitor Roque, aunque la inercia local ya se había asentado. A los seis minutos de la reanudación Votja, tras un rechace, logró el 1-1 y tres minutos después fue Patrik Vydra, en otra jugada mal defendida, el que puso el 2-1 ante la desesperación bética y de su entrenador, que le dio sitio ahora a otro canterano, Jesús Rodríguez, y al congoleño Cédric Bakambu, por Juanmi y Chimy Ávila.
Esos cambios hicieron reaccionar al Betis, que apretó mucho ante el meta Matous Trmal y que en acciones de Jesús Rodríguez, Bakambu o Lo Celso buscaron el nuevo empate, pero el tiempo pasó sin conseguirlo y, además, el argentino fue expulsado con roja directa en el minuto 89 por una entrada a un rival. Esta circunstancia complicó mucho más la misión de los visitantes, que no pudieron ni amarrar el empate y que regresan a Sevilla con una situación complicada en el caminar por esta competición.
